Diversas instituciones han sido ligadas a través de contratos millonarios a la empresa farmacéutica Sumilab S.A. de C.V., ligada al grupo delictivo Los Chapitos.

Se trata de dos universidades públicas, dos centros de investigación científica, un instituto educativo, una oficina para diseñar políticas de salud y un hospital gubernamental; todos ubicados en Sinaloa, informa Milenio.

Desde el pasado 09 de mayo, dicha empresa ha ingresado a la “lista negra” de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés); el gobierno de los Estados Unidos acusa a dicha empresa de estar ligada a través de actividades o transacciones a favor de los hijos de Joaquín Guzmán, con el fin de potenciar la producción y tráfico de drogas hacia los EEUU.

La Plataforma Nacional de Transparencia refiere que desde el 2018, dicha farmacéutica ha recibido 180 contratos por parte del estado, los cuales pueden representarse en un total de 28.2 millones de pesos en ingresos.

Milenio informa que, para otorgarles, durante el pasado gobierno estatal de Sinaloa, y durante el actual, se utilizó una red de dependencias principalmente del sector educativo.

Las fuentes económicas han sido el Instituto Sinaloense de Infraestructura Física Educativa, el ahora extinto Centro de Ciencias de Sinaloa, la Universidad Politécnica del Valle del Évora, la Universidad Tecnológica de Culiacán, la Coordinación General para el Fomento de la Investigación Científica e Innovación del Estado de Sinaloa, el Hospital de Culiacán, así como de Servicios de Salud de dicho estado.

Los Chapitos se han visto beneficiados a costa del erario público a través del gobierno del estado de Sinaloa, durante los últimos cinco años; por su parte el gobierno de los EEUU mantiene bajo la lupa cada una de sus acciones en busca de su arresto y extradición, luego de la crisis que se vive en dicho país a causa del consumo del fentanilo, cuyos principales traficantes son los hijos del chapo.

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