San Diego.- Karla Uribe y Oliver Aguilar están decididos a aprender inglés y comenzarán a hacerlo gracias a que el Sam Skaggs se enfermó hace algunos años.

La familia Skaggs es bien conocida por haber iniciado el concepto de las cadenas de supermercados en los Estados Unidos y están detrás de empresas como Safeway, Albertsons, Longs Drugs y Osco.

Uno de los hermanos Skaggs, Sam, tuvo que permanecer en cama por motivos de salud y a su cuidado estuvo una hispana con gran sentido del deber, pero que apenas hablaba un poco de inglés.

Skaggs se conmovió al escuchar que su empleada que no sabía más inglés porque nunca había tenido la oportunidad de estudiarlo, y ese fue el inicio de lo que ahora es la escuela Juan Diego Adult Center en 1615 Mater Dei Drive, Chula Vista.

La familia Skaggs donó ochenta y cinco millones de dólares para la construcción y operación de una escuela gratuita en donde, desde hace cinco años, se enseña inglés a todos los adultos que deseen aprenderlo.

Silvia Torrez, directora del programa, informó que la escuela cuenta con seis niveles de inglés y que al inscribirse los alumnos hacen un examen de colocación para saber en qué nivel iniciar.

Los maestros son todos certificados en la enseñanza del inglés como segundo idioma. Además del inglés, se han añadido clases de computación, nivel básico y avanzado, y clases de preparación para el GED (Certificación de estudios de preparatoria).

Desde la apertura de la escuela en 2006, aproximadamente mil 500 estudiantes han recibido clases gratuitas, en su mayoría residentes de los códigos postales 91913, 91914 y 91915 que son los que se encuentran alrededor de la escuela.

De hecho, el Juan Diego Adult Center es parte de la escuela privada Mater Dei Catholic High School, misma que recibió el donativo de la familia Skaggs para administrar la escuela gratuita.

"Debido a nuestra ubicación los estudiantes que recibimos en realidad no son los más necesitados de educación gratuita", dijo Torrez.

"Sin embargo, sí hay muchos adultos en esta área que quieren y necesitan aprender inglés, hay quienes llevan aquí más de 20 años y aún no lo hablan", afirmó.

Karla Uribe, originaria de la Ciudad de México, lleva 10 años en este país y aunque entiende bastante el inglés, aún no logra sostener una plática fluida. Se animó a inscribirse porque le pareció formidable que alguien estuviera haciendo una obra altruista de esta índole.

Por su parte, Oliver Aguilar, también del Distrito Federal, lleva dos años en el país y su única escuela de inglés han sido los programas para niños que ve en KPBS. "Se ve que esta es una escuela seria, con maestros de buena calidad y buen ambiente […] estoy entusiasmado de comenzar las clases", aseguró.

Este año, el Juan Diego Adult Center comenzó a cobrar una cuota de inscripción de 40 dólares, pero el dinero se le devuelve integro a los estudiantes que tengan al menos el 80 por ciento de asistencia. Cada nivel de inglés dura un año y las clases son dos veces por semana, dos horas al día, ya sea los lunes y miércoles o martes y jueves de 6 a 8 de la noche.

Los horarios son los mismos para las clases de computación y tanto los cursos de inglés como los de computación cuentan con talleres con computadoras para cada estudiante.

Alejandra Muffler, Coordinadora de la escuela, dijo que el mayor reto que enfrentan es la retención de estudiantes, ya que más de la mitad de los inscritos nunca van a las clases o dejan de asistir al poco tiempo. "No sabemos qué pasa, pero el año pasado registramos a más de 600 personas y sólo 200 cursaron las clases", declaró.

El jueves 14, la escuela organizó un evento de inscripción en donde hubo comida y entretenimiento gratuitos. Alrededor de 60 personas asistieron. Aunque las clases dieron inicio el 25 de julio, las inscripciones continúan abiertas hasta el 15 de agosto.

Edith Fuentes escribe para Enlace, el semanario en español de San Diego Union Tribune. editorial@mienalce.com