Los Ángeles, 24 ago (EFE).- Cinco estudiantes indocumentados del sur de California se entregaron hoy a las autoridades migratorias como parte de una protesta contra las deportaciones frente al edificio federal en el centro de Los Ángeles.


Pese al reciente anuncio del Gobierno federal de revisar uno a uno los casos de deportación, varios activistas aseguraron hoy que todavía las autoridades siguen aplicando el programa "Comunidades Seguras" poniendo en riesgo a los jóvenes que son detenidos por problemas menores.


"El presidente (Barack) Obama dijo que no iba a seguir deportando estudiantes pero la verdad es que eso todavía no se está cumpliendo y queremos manifestar nuestro rechazo", dijo a Efe Jesús Barrios, organizador de The Inland Empire DREAM Team (IEDT).


"Demandamos que el gobierno detenga el programa de 'Comunidades Seguras' porque sigue separando a las familias y maltratando a nuestra comunidad", agregó Barrios.


Luis, un joven mexicano traído por sus padres a EE.UU. cuando era un niño, fue uno de los cinco estudiantes indocumentados que se entregaron a la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE).


"No voy a seguir viviendo con miedo. Por eso voy a protestar por el programa de 'Comunidades Seguras' y a enfrentar mi situación", explicó a Efe el joven indocumentado antes de entrar a la sede de ICE y ser arrestado.


"Si nos dan la oportunidad de hacernos ciudadanos el país gana porque aportamos nuestros conocimientos y nuestro trabajo al desarrollo de la nación", agregó. "Yo estoy seguro que seré un buen miembro de mi comunidad".


Isaac Barrera, otro de los estudiantes indocumentados sintió cómo su mundo se derrumbaba a causa de una infracción menor de tráfico.


"Me torturaron, me insultaron y me amenazaron con perseguir a mi familia" denunció hoy Barrera. El joven explicó que si no hubiera sido por una organización comunitaria que lo ayudó, "me hubieran deportado".


Sin embargo, no todos frente a la sede de ICE defendían a los indocumentados. Al llegar al edificio federal los estudiantes encontraron a un grupo que los criticaba.


"Soy latina pero estoy en contra de algo que es ilegal. Debemos aplicar nuestras leyes", declaró Rosa Moreno, una de las personas que protestaba contra los estudiantes indocumentados.


"Necesitamos el dinero (que ellos gastan) para nuestros hijos y para su educación", argumentó Moreno al referirse a los costos de la educación de estudiantes indocumentados


Cerca de 50 jóvenes, algunos de ellos sentados sobre un cartel que decía "No permaneceremos más en las sombras", bloquearon la puerta del estacionamiento por donde sale el autobús que lleva a los indocumentados a los centros detención.


Luego de dispersar la protesta, las autoridades arrestaron a tres personas que se negaron a despejar la salida del autobús.