De regreso a los platillos del centro de la mesa, el mesero nos sirvió porciones de cada platillo asegurándose de que cada que terminábamos uno, tuviéramos un plato limpio para el siguiente. Adoro la atención al detalle, los colores y las salsas de los platillos, ninguna interfirió con la otra. Empezamos con Pulpitos con Gambas cocidos a la perfección, no pude evitar dejarme llevar por cada pieza de mariscos y la salsa que los cubría completamente.

Lo siguiente fue el probar una Ternera rostizada llena de pimienta roja, la que fue mi segundo platillo favorito de la noche. Me encanto como cada elemento estaba perfectamente sazonado, lo que les permitía sobresalir en cada platillo. El último platillo de la noche fue el Solomillo Cabrales. Suave carne bañado en Cabrales y queso derretido. Antes de esa noche, nunca había probado Cabrales con queso, estoy contenta de haberlo hecho. Son un poco fuertes para algunos, más para mí fuerte y oloroso es mejor. Es de sabor similar al queso Gorgonzola y al Roquefort, pero este es tradicionalmente del norte de España.

Con su autentica concina española y sus cocteles, la Taberna Española es un lugar maravilloso para una velada romántica o un para un escape temporal a España.

Por: Kristin Díaz de Sandi

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