A partir de la industrialización de mitades del siglo XX, tanto Estados Unidos como México utilizan el agua disponible en el río Colorado. Como es de todos conocidos, la distribución del recurso se hace de forma regular a partir de la firma del Tratado de 1944 entre ambos países. Ello garantiza que para nuestro país fluyan 1,850 millones de metros cúbicos que son usados tanto para uso agrícola como para actividades urbanas. Tijuana es una gran ciudad y con un fuerte empuje económico gracias a que diariamente el agua llega a su red hidráulica.

Pareciera hasta ahora que vivimos una realidad donde contar con agua no es ningún problema. A diario lavamos platos, nos bañamos, regamos las plantas, en fin, gastamos agua como si viviéramos a un lado del río. Ahora bien, cuando el flujo de agua de un río se encuentra totalmente repartido le llaman cuenca cerrada. Es decir, cuando ya no se cuenta con más agua para repartir. Debo decirte que es el caso del río que compartimos con los norteamericanos.

Imagínate, el río alimenta las necesidades de California, Arizona, Nevada, Nuevo México, Colorado y Wyoming más lo que nosotros también requerimos. El agua que sale por la llave de tu casa recorre 2,700 kilómetros, y deben suceder un sinfín de negociaciones entre ambos países para que regularmente cuentes con ella. La prensa norteamericana desde inicios de este año ha estado dando seguimiento a la sequía que afecta por séptimo año al río Colorado. Para ellos ya es una emergencia, agrégale la tan característica paranoia gringa. Ya le indicaron a los californianos que deben aprender a vivir con menos agua.

Tijuana, polvos del desierto

Cuando menos desde finales de los ochenta los tijuanenses comenzamos a contar con agua regularmente en nuestras casas. Gracias a la construcción del acueducto río Colorado-Tijuana, esta ciudad logró viabilidad y el crecimiento urbano y económico se pudieron garantizar.

Tenemos al menos 20 años acostumbrados a tener agua a cualquier hora en prácticamente todas las zonas de la ciudad. Aunque desapareció el monopolio de los piperos, no hemos aprendido a ser usuarios responsables pues la desperdiciamos y no pagamos puntualmente el consumo.

Por el contrario, desperdiciamos el agua en todos los usos que le damos.

Sin embargo, desde finales del sexenio estatal anterior hemos sido testigos de continuos cortes de agua so pretexto de la reparación de fugas y sustitución de tuberías en la red hidráulica de la ciudad.

Súmale también que el sexenio de Osuna Millán falló en instalar y poner en marcha una planta desaladora entre Tijuana y Ensenada con el propósito de abatir la demanda de agua de esta creciente zona. La cuestión es que estos cortes temporales cada vez son más continuos, ¿no será esta una estrategia para racionar el agua en Tijuana?

Lo que se supone que se arreglará en algunas horas tarda hasta un día. O más. La CESPT cumple con comunicar que habrá cortes de agua pero parece no tener mucha responsabilidad en cumplir con los tiempos que estipula. Ahora, no debemos sorprendernos porque, después de todo, en Ensenada el tandeo ya es cosa de todos los días. ¿No serán los cortes una estrategia para que el tijuanense se vaya acostumbrando a racionar y guardar agua para los días de sequía que ya están aquí? Si esta ciudad se queda sin agua, prepárate no sólo para la sequía y para que los parques dejen de estar verdes, sino para una gran crisis económica. Después de todo, ¿Quién estaría dispuesto a invertir en una ciudad que no tiene agua?

Y mientras tanto, en California ya hay una declaratoria de emergencia pues para los norteamericanos este es sin lugar a dudas un tema de seguridad nacional.

El presidente Obama ya estuvo en la zona del río Colorado para atestiguar la sequía. Del lado mexicano seguimos atenidos a que nuestros vecinos respeten el Tratado de 1944. El gran problema es que la demanda de ambos países cada vez es mayor y la cantidad de agua sigue siendo la misma. ¿Veremos una ruptura de relaciones diplomáticas por la escasez de agua? En un caso extremo no te sorprendas viendo al Ejército gringo cerrando válvulas en la Presa Morelos en Mexicali, por donde transita el agua a México.

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binomio (1+4) Frontera digital, es una revista electrónica que nace en la región de Tijuana-San Diego y aborda temas políticos, sociales, económicos y culturales.

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