ESTADOS UNIDOS.- En el 2013, Jennifer Lawrence se coronó como la mujer más codicionada de Hollywood según el portal para caballeros, AskMen, pero el público masculino no fue lo único que J-Law conquistó, pues también se posicionó como una de las actrices más admiradas por las mujeres, no solo por su belleza y talento, sino por su actitud despreocupada, espontanea y bromista.

La J-Law manía se disparó a tal grado que una de sus seguidoras, Kitty, una madre texana de 30 años de edad, decidió que haría hasta lo imposible para conseguir parecerse a ella, al menos en lo que respecta al terreno físico. Gastando un aproximado de $25 mil dólares en un total de 6 operaciones quirurgicas: Aumento de senos, liposucción de rostro y cuerpo, rinoplastia y algunas inyecciones de grasa en puntos estratégicos.

De acuerdo a las declaraciones de Kitty durante un programa de ABC News, esta decisión habría sido tomada después de reflexionar sobre el aspecto que tomó su cuerpo luego de dar a luz, ya que afirmó no sentirse cómoda con los cambios que la maternidad le dejó.

Por otro lado, su esposo se ha deslindado de cualquier participación en la toma de decisión, aclarando que la apoya, pero no tiene preferencia por esta famosa :

"Jennifer Lawrence no es una celebridad por la que yo tenga sentimientos, buenos o negativos. Es decisión totalmente de ella."

"Claro que me veo como Jennifer Lawrence. Creo que lucía como ella incluso antes de las operaciones. Ahora, mis rasgos son más refinados y cercanos a los que ella tiene" comentó Kitty unas semanas después de su última intervención quirúrgica.

Este tipo de operaciones son más comunes de lo que podrías pensar, según han declarado con anterioridad varios médicos especialistas. En octubre del año pasado, Toby Sheldon, un hombre de 33 años causó polémica al darse a conocer que invirtió poco más de $100 mil dólares para parecerse a Justin Bieber.

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Elizabeth.rosales@sandiegored.com