TIJUANA.- La ola de reacciones tras la victoria de México de forma polémica ante Panamá debía hacer una escala en Tijuana y es un entrenador como Rubén Omar Romano con más de 15 años de experiencia en un banquillo quien da su punto de vista acerca del duelo tan extraño que jugó ayer México.

El argentino reconoció que no sabe cómo hubiese reaccionado él. Y es que para Romano, la serenidad del entrenador de Panamá es digna de reconocer, puesto que fue el único que se dio cuenta de las sanciones que podrían repercutir a la selección centroamericana en caso de abandonar, y allí logró convencer a sus jugadores de regresar a la cancha.

"Los jugadores no sabe, por supuesto que no fue penal y es una burla al futbol y lo dijo bien Miguel (Herrera), el equipo no mereció ganar, pero también pasa en contra. Entiendo la molestia de los panameños, entiendo la capacidad del técnico de poder aguantar y saber que no se podía ir, yo no sé qué hubiese hecho, pero las consecuencias son mayores. Muy mal partido de México", sentenció el argentino.

También dejó en claro su percepción del relativo "Fair Play". Y es que la polémica de que si Andrés Guardado tuvo que fallar el penal o Miguel Herrera decirle al árbitro ha sido muy discutida.

"Al final de cuentas, de qué viven los técnicos. Sí, una vergüenza, pero ¿Quién ganó?… México. Si hay algo muy claro es que los jugadores pueden hacerlo (fallar el penal) y es aplaudible, pero yo creo que el "Fair Play" es no hacer cosas de más, jugar limpio, esto no fue de los jugadores, fue el árbitro. Pónganle como quieran, si fue arreglado, si hay corrupción o si se equivocó", explicó.