SAN DIEGO.- Más de 5 mil personas se dieron cita este sábado en el Qualcomm, hogar de los Chargers de San Diego, para vivir una gran experiencia en la celebración del tradicional Fan Fest 2015 que anuncia el inicio de la pretemporada de la NFL.
Cada aficionado vivió el sueño a su manera, muchos al bajar de sus autos y otros desde el "trolley" admiraron la grandiosa estructura del "Jack Murphy Stadium" que se revistió de banderas de celebración y justo en el centro brillaba el número 55,insignia del nuevo miembro del Salón de la Fama, Junior Seau, antiguo linebacker del equipo del rayo.
Otras personas disfrutaron de las compras, y a donde miraras cientos de personas llevaban bolsas con artículos de su equipo, coleccionables listos para ser firmados y jerseys que recordaban a grandes estrellas como LaDainian Tomlinson y hasta los nuevos elementos como Melvin Gordon.
La festividad fue en un ambiente completamente familiar y los niños pudieron disfrutar de las atracciones y juegos que estuvieron disponibles en los alrededores del estadio;desde brincolines, hasta una zona de inflables para realizar pases y goles de campo hicieron de la celebración un parque de diversiones para los más pequeños.
OVACIONAN A LAS ESTRELLAS
Mientras la fiesta se llevaba a cabo en la periferia del Qualcomm, miles tomaban asiento cerca del emparrillado para ver los calentamientos de las jóvenes promesas del equipo sandieguino.
El ambiente estalló en gritos y coros cuando la voz oficial del estadio comenzó a dar aviso de la entrada de los anfitriones principales y saliendo del túnel Danny Woodhead, Brandon Flowers, el novato Marvin Gordon y el mariscal Phillip Rivers, fueron ovacionados.
Por casi dos horas y media el equipo entrenó frente al sol abrazador de San Diego y frente a los ojos llenos de ilusión de toda su afición la cual aplaudía cada pase atrapado y cada buena corrida de los Chargers.
Después de los estiramientos y las prácticas el equipo dio inicio a un "scrimmage" o juego de exhibición entre la ofensiva y defensiva de su equipo y haciendo alarde de sus habilidades se dijeron listos para abrir la pretemporada.
La fiesta terminó con firma de autógrafos y la convivencia entre jugadores y el público, en la que la afición tuvo la oportunidad de tomarse fotos, aumentar el valor de algunos coleccionables e incluso de abrazar a su estrellas favoritas de la NFL.
Editorial@Sandiegored.com
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