TEXAS.- Este miércoles el hispano, Daniel López, recibió la inyección letal, después de pedir una y otra vez ante la corte que aceleraran el proceso de su ejecución. Este martes se confirmó que el miércoles a las 18:00 horas local se realizaría la ejecución en la cárcel de Huntsville.

Según información de El País, lo que más ha sorprendido es que a comparación de los presos que han pasado por el paballón de la muerte, López no se mostró pidiendo clemencia o justicia, ni usó todos los recursos posibles para atrasar ese momento, él prefirió enfrentar la situación. A las 18:31 de este jueves, fue declarado muerto en la unidad Huntsville.

En una entrevista dijo: "Acepto mi castigo, no lo hice a propósito, maté a un policía porque estaba tratando de escapar, no fue intencional pero me siento responsable, es por eso que estoy listo para irme".

López en un juicio rechazó un acuerdo con los fiscales donde le darían cadena perpetua si se declaraba culpable, sin embargo, él pidió la pena de muerte. Sus abogados trataron de hacer hasta lo imposible porque no se le culpará, donde alegaban ante la Corte Suprema que su cliente sufría de una enfermedad mental severa, pero la corte hizo caso a la petición de López y continúo para dar término al proceso lo antes posible.

Daniel siguió firme a su postura, sus últimas palabras fueron: "Espero que esta ejecución ayude a mi familia y también a la familia de la víctima. Esto no debió haber ocurrido, fue algo fuera de mi poder. Sólo puedo recorrer el camino en frente de mí y hacer lo mejor de ello. Lo siento por hacerlos pasar por esto. Lo siento, los amo. Estoy listo".

Vía El País

Más noticias en SanDiegoRed.com

Sigue a San Diego Red en Facebook y Twitter.

ariday.ortega@sandiegored.com