Lenny B. Robinson trabajó por muchos años en un negocio de limpieza, plataforma con la que consiguió cientos de miles de dólares para su Batimóvil, traje del caballero de la noche y los juguetes que le regalaba a niños internados.

El padre de 51 años conducía su Lamborghini personalizado cuando se orilló en una carretera de Maryland por fallas con el motor. Robinson revisaba el cofre cuando su carro fue golpeado por un Toyota Camry, choque que provocó el impacto que le quitó la vida. Lenny fue declarado como muerto en la escena mientras que el conductor del Camry aún no recibe sentencia (la investigación se encuentra en proceso).

No es la primera vez que Lenny figura en los encabezados, ya que su introducción viral fue hace tres años cuando lo detuvo una patrulla para preguntarle por sus placas. Este inconveniente se desenvolvió de una manera tan adorable y simpática que hasta le pidieron foto los oficiales.

Lenny regaló incontables libros, autógrafos, brazaletes con el logo de Batman y otros artículos del personaje a niños de Maryland y DC (donde dirigió fiestas temáticas de superhéroes en hospitales). El confundador de "Hope for Henry" (organización con la que colaboraba) dijo que Lenny "hacía todo lo que le pidiera, siempre decía que sí… era mágico."

Su hermano Scott Robinson lo recuerda como alguien que "impactó muchas vidas y le sacó sonrisas a muchos niños, eso era todo lo quería hacer". También resalta que nadie podrá reemplazar a su hermano y espera que el legado de Lenny influya a muchos otros.

Vía Elite Daily

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