Los Padres de San Diego de Bud Black y luego Pat Murphy acabaron con un deplorable récord de 74-88 a 18 juegos de Los Angeles Dodgers. El equipo cayo en racha pésima de sólo 3 ganados y 7 perdidos. El gerente general A.J. Preller hizo grandes cambios a un equipo que estaba sumido en la mediocridad y con poca ofensiva que atrajera fanáticos al PETCO Park. En la pretemporada, los carmelitas fueron de los equipos en hacer un gran splash de gran manera con la adición de bates prometedores y que daban la impresión de poder pelear con los Dodgers y Giants en el Oeste de la Nacional.

El equipo despidió a Bud Black tras una espantosa primera mitad que empezó con una buena serie en Dodger Satdium con un Matt Kemp que brillaba ante su ex equipo. La directiva del presidente y CEO Mike Dee esperaba por lo menos aspirar al comodín de la Nacional y llegar por primera vez a la postemporada desde 2006. En 2007 los Padres se quedaron con las ganas al perder un tiebreaker por el Wild Card del Oeste de la Nacional contra los Colorado Rockies. El problema del equipo fue que Derek Norris fue el que cargó con la ofensiva del equipo con Matt Kemp desaparecido en abril, mayo y junio. El cátcher ex National y Athletic bateó para .260 en mayo pero con 21 remolcadas y 3 HR. En junio empezó a caer su bate y fue cuando Matt Kemp (23 HR, 100 CI) se empezó a calentar con el madero con 15 remolcadas y 5 HR. A partir de allí sumó meses de 15, 25 y 19 remolcadas con 22 de sus 23 HR.

La racha más importante del equipo fue una seguidilla de 5 juegos ganados a mitad de agosto con serie ganada a los Cards en casa. Los Padres nunca se pudieron poner en .500 y la derrota en una serie ante los alicaídos Brewers en agosto fue la muestra de que estos Padres no estaban para grandes cosas. Los Padres fueron barridos en casa ante los sorprendentes Houston Astros en casa y eso los bajó por primera vez debajo de .500 y nunca pudieron superar esa barrera. Bud Black fue despedido el 15 de junio y eso pudo ser la gota que derramó el vaso dentro del vestidor de que la temporada se tornaba hacia a un punto completamente diferente. La racha de 16 juegos perdidos de 23 no sólo desgasto a los Padres pero la relación de Bud Black con A.J. Preller. Black estuvo de 2007 a 2015 pero con equipos con poca ofensiva y con mucho pitcheo. El mejor equipo que tuvo fueron los Padres de 2010 que se colapsaron al final y permitieron que los San Francisco Giants ganaran la división. La clave del equipo era tener un buen pitcheo en un parque que se distingue por eso, pero no fue el caso.

Una ERA de 4.13 con promedio de ofensiva de 2.9 carreras por juego con .215 de promedio es una receta ideal para el desastre y el sótano de cualquier división en MLB. El único que se salvó en la rotación abridora fue Tyson Ross. El alto derecho de Berkeley (3.26 ERA, 10-12, 212 K y 1.31 WHIP) fue lo más constante de los lanzadores abridores. Ross terminó con una racha de 5 salidas de calidad exceptuando su salida ante los Brewers. En julio y agosto tuvo ERA debajo de 3 (2.81 y 2.89) con 5 victorias en 7 salidas. La clave del éxito fueron sus 6 HR admitidos siendo gran stat en ese rubro. El slider de 87 millas siguió siendo su pitcheo para ponchar con ventaja en la cuenta. El sinker estuvo allí sumado a su recta de 94 explosiva y fue el as de la rotación quitando ese puesto al gigante rubio Andrew Cashner y el veterano que llego de KC, James Shields. Ross mejoró su arsenal con un buen cutter además de generar muchas rolas y así el poder llegar más lejos en los partidos.

Otra clave fue que Justin Upton a pesar de sube y baja, al final tuvo 26 HR y 81 remolcadas. Su promedio de .251 no fue bueno con sus 159 bolsitas de chocolate. Upton batalló contra los zurdos y no se contó con el jardinero ex Ray, Wil Myers que estuvo casi toda la temporada fuera con una lesión en su muñeca. En mayo bateó .343 con 23 remolcadas y 6 HR pero en junio y julio bateo debajo de la línea Mendoza.

En defensiva el máscara Derek Norris lideró a los catchers en cuanto a robos de base y poniendo de out. Norris es un buen bate pero también fue de ayuda para el framing con lanzadores jóvenes y algunos veteranos fajadores como James Shields (3.91 ERA, 13-7, 216 K). Los que sorprendieron fueron Brandon Maurer viniendo del pen y siendo efectivo con un Joaquín Benoit en la octava de sube y bajas. Craig Kimbrel cumplió pero tuvo una ERA de 2.58 a pesar de 39 salvamentos con sólo 4 blown saves. Kimbrel recibió 6 HR (máxima cantidad en su carrera) con 17 carreras limpias. The Kimbrel fue el más constante del pen de cualquier manera a pesar de su "peor" temporada en su carrera en Grandes Ligas.

En lesiones Ian Kennedy siento nunca estuvo sano y con tres viajes a la lista de lesionados tuvo una mala campaña. El hombre del gran cambio de velocidad tuvo una robusta ERA de 4.28 con 9-15. Andrew Cashner en 31 salidas tuvo mala suerte de la ofensiva pero al igual que Kennedy y en parte Ross, recibió castigo tempranero del cual no se podía reponer a pesar de buenas salidas después del daño. Cashner (6-16) y 4.34 tendrá en 2016 un año de make or break porque sino los Padres pueden optar por cambiarlo a mitad de temporada como se especulo que podía ir en cambio a los Yankees. Odrisamer Despaigne es el que con su curva lenta no sorprendió a nadie y tuvo una campaña que lo relegó mucho a AAA. Brandon Morrow y Josh Johnson estuvieron lesionados y no pudieron ayudar a la rotación.

La ofensiva ahora tendrá que recaer en Yangervis Solarte que fue un utility y un buen madero para los carmelitas. Upton será agente libre y el venezolano bateó 14 HR y 63 remolcadas. Solarte fue bueno con el cuero y le quitó el puesto al otrora gran prospecto de los Boston Red Sox, Will Middlebrooks. El infielder Cory Spangenberg tuvo una gran segunda mitad y veremos si arma una base joven el equipo con el OF Travis Jankowski que también tuvo pocos juegos.

El manager interino Pat Murphy hizo lo que pudo con las piezas disponibles pero es posible los Padres busquen timonel relegando a Murphy a sus tareas en AAA. Jedd Gyorko fue enviado a las menores por Murphy y regresó con hambre y acabó bateando bien en la temporada. Su gran contrato le exige que rinda desde el comienzo y en 2016 será el líder de la ofensiva junto a Matt Kemp y Myers que ha probado en su carrera ser propenso a las lesiones.

El bullpen con Dale Thayer, Kevin Quackenbush y demás obligó a tirar en el ruedo a Marcos Mateo de AAA o traer al ex abridor de los Nats y Orioles, Bud Norris. Sin duda que el relevo es una de las áreas más ineficaces del equipo con miras a reforzarse en un conjunto que debe basar su éxito en el pitcheo como ha sido en los últimos años.

Twitter@AlejandroCasaas.