Texto originalmente publicado por: Keiser Health News

Los adultos jóvenes estadounidenses son los que tienen un índice más alto de posesión de un smartphone que cualquier otro grupo demográfico. Investigadores de Duke University querían ver si el aprovechamiento del uso de smartphones con una aplicación de bajo costo hecha para bajar de peso podría ayudar al 35 por ciento de adultos jóvenes en los Estados Unidos quienes sufren de sobrepeso u obesidad.

Si tú crees que los smartphones te van a resolver todos tus problemas de salud, no te va a agradar lo que descubrieron los investigadores en este estudio. El uso de la app no hizo gran diferencia en la pérdida de peso en jóvenes adultos.

El estudio, el cual fue publicado en el diario Obesity, observó a 365 jóvenes adultos entre las edades de 18 a 35. Un tercio de participantes usaron una aplicación para Android específicamente creada para el estudio, la cual no solo contaba las calorías, peso y ejercicio sino que también ofrecía funciones interactivas como programar metas, juegos y apoyo social. Otro tercio de los participantes recibieron seis semanas de sesiones con un entrenador personal seguido de llamadas por teléfono para ver cómo iban. Adicionalmente, a este grupo con entrenador personal se les sugirió que revisaran su peso, calorías y ejercicio con un smartphone. Al último tercio de los participantes solamente se les dio tres folletos con información sobre cómo comer saludable y cómo ejercitarse.

Los investigadores rastrearon el progreso de los jóvenes adultos después de seis meses, un año y dos años. El grupo con entrenador personal perdieron más peso que los otros dos grupos después de seis meses, pero esa delantera la perdieron después del seguimiento de uno y dos años. En cuanto al grupo que usó la app, su pérdida de peso promedio nunca llegó a ser más que los otros dos grupos.

Liderado por la Dra. Laura Svetkey dijo que ella y sus colegas estuvieron sorprendidos al igual que decepcionados con los resultados. "Dado el gran poder que tienen las aplicaciones de celular y sinceramente la popularidad de estas aplicaciones de salud y para mantenerse en forma en el mundo comercial, creímos que esta sería una buena estrategia para proporcionar una intervención efectiva muy general y con un costo potencialmente bajo", dijo Svetkey, una profesora de medicina en la Escuela de Medicina de la Universidad de Duke.

Pero, Svetkey dice que es difícil llegar al mismo nivel de intensidad con una aplicación que por medio de un entrenador personal y la gente tiende a dejar de usar las aplicaciones de pérdida de peso después de un rato. "Sabemos en general que entre más estén involucradas las personas en la intervención, obtendrán mejores resultados, entonces es muy probable que necesitemos reevaluar cómo hacer que una intervención de pérdida de peso por medio de tu celular sea más efectiva", dijo Svetkey.

Cuando se trata de jóvenes adultos y perder peso, los riesgos son mayores. El aumento de peso durante la etapa de joven adulto está asociado con varios problemas de salud en el futuro, incluyendo síndrome metabólico y enfermedades cardiovasculares, dijo Svetkey.

No está claro si estos resultados solo aplican para las aplicaciones que están disponibles en el mercado. Svetkey dice que ella solo está familiarizada con un estudio clínico que revisaba a aplicaciones de pérdida de peso populares en el mercado, el cual también concluyó que no eran efectivas en promover la pérdida de peso. Aun así, no se puede decir que estas aplicaciones no sirven para ciertas personas en ciertas situaciones.

Weight Watchers, la cual usa una combinación de aplicaciones y entrenadores de forma grupal y MyFitnessPal, una aplicación de rastreo de alimentos y ejercicio muy popular, no respondieron a nuestras preguntas al momento de publicar la nota.

Los resultados de estos estudios no son razón suficiente para darse por vencido en cuanto al potencial que tienen las aplicaciones para perder peso, al contrario, son una razón para aumentar las investigaciones en esta área. Se necesita más trabajo para poder llegar a entender cómo emplear estas tecnologías y balancear lo que aportan de una forma en la que ayude a la gente a cambiar sus hábitos de alimentación y ejercicio, dijo Svetkey.

Pero, ¿Hay algún real daño al usar alguna de estas aplicaciones, aún si se han comprobado en estudios recientes que no son efectivas? Svetkey sugiere que se podría tratar de esfuerzos en vano.

"Tenemos una epidemia muy seria y si estamos enfocándonos en algo que no sirve, entonces esa es energía que se podría estar usando en encontrar y diseminar cosas que sí funcionen".

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