TEXAS. Una investigación determinó que la actividad petrolera y la explotación de gas ha provocado los temblores en el estado que han sucedido incluso fuera de la zona sísmica, desde 1925.

La información recuperada por el Instituto de Geofísica de la Universidad de Texas en Austin y la Universidad Metodista del Sur (SMU) indica que 59% de las actividades de explotación provocaron temblores y terremotos con un largo alcance y que solo el 13% fue por causas naturales.

Se determinó que el incremento de un 600% de los sismos comenzaron con la fracturación hidráulica en 2008, cuando un terremoto sacudió el aeropuerto internacional de Dallas-Fort Worth.

Sin embargo, no se ha podido determinar (como en Canadá) que el fracking sea la consecuencia directa.

En marzo pasado, el servicio geológico estadounidense enlistó a Oklahoma, Kansas, Texas, Colorado, New Mexico and Arkansas por el riesgo que representan las actividades humanas para las 7 millones de personas que viven cerca de las plantas de petróleo y gas.

Con información de Radiofórmula y Buzzfeed

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