Redacción EE.UU., 18 ene (EFE).- Los Tigres de Detroit pusieron fin a cualquier tipo de especulación e informaron que decidieron poner en asignación al lanzador venezolano Armando Galarraga, a las pocas horas de haberlo firmado por una temporada.
Al mismo tiempo de que los Tigres indicaban que habían llegado a un acuerdo para firmar contrato por un año con el serpentinero derecho Brad Penny, que será el que ocupe el puesto de Galarraga.
De esta manera el venezolano, que en junio estuvo cerca de lanzar un juego perfecto después de hacerlo en ocho entradas y dos tercios, pero fallar en el bateador número 27 y último del juego aunque por error del árbitro de la primera base, ahora se encuentra en el limbo, sin saber para qué equipo jugará la próxima campaña.
Los Tigres por la mañana le habían dado a Galarraga un contrato valorado en 2,3 millones de dólares, pero posteriormente decidieron ponerlo en asignación.
Ahora el equipo cuenta con 10 días para cambiarlo de equipo, dejarlo libre o enviarlo a las ligas menores. En caso de que nadie reclame por la vía de los "disponibles", el venezolano podría estar en los entrenamientos del equipo de las mayores de los Tigres como invitado, pero fuera del roster.
Los Tigres informaron que el contrato de Penny incluye un salario base de tres millones de dólares, tres millones más en incentivos.
El gerente general de los Tigres, Dave Dombrowski, admitió que no era algo normal lo que habían hecho, e inclusive era la primera vez que el participaba en este tipo de gestión, pero dijo que era lo mejor para todas las partes.
"He hablado con Armando y entiende que es la mejor opción si conseguimos un equipo en el que puede lanzar de forma regular", declaró Dombrowski. "Sabe que lo apreciamos, que es un profesional y persona de primera clase, de ahí que queramos lo mejor para él".
