Redacción EE.UU., 26 ene (EFE).- El lujo de poder asistir al partido de la cuadragésima quinta edición del Super Bowl de la NFL, que se va disputar el próximo 6 de febrero en el Cowboys Stadium, de Arlington (Texas), con capacidad para más de 93.000 espectadores, tendrá un coste medio por entrada superior a los 3.600 dólares.
Según informes económicos de las compañías especializadas en la venta de entradas para el partido que van a disputar los Steelers de Pittsburgh y los Packers de Green Bay, dos de los equipos con más historia en la NFL, el precio medio será de 3.678 dólares.
Esto supondrá una recaudación récord, lo mismo que se espera en cuanto a la audiencia de televisión de los millones de personas que lo van a ver a través de todo el mundo.
Varios informes periodísticos señalan que un hombre de negocios ya ha pagado 73.000 dólares por conseguir la reserva de una suite del estadio con 15 asientos, lo que supone un promedio cercano a los 5.000 dólares por persona.
Pero eso no es nada comparado con algunas ofertas que hay colocadas en distintas páginas de internet: en una de ellas se vende una suite completa por 254.000 dólares, con los impuestos incluidos.
Lo elevado de los precios de las entradas confirma que la crisis económica comienza a superarse en Estados Unidos y lo mismo sucede con la vuelta de varias compañías que no estuvieron presentes en los dos últimos años en la promoción del acontecimiento más importante de la temporada dentro del mundo del deporte profesional.
