Redacción EE.UU., 25 ene (EFE).- El mariscal de campo de los Packers de Green Bay, Aaron Rodgers, sigue con dolores en el hombro derecho, que se lastimó el pasado domingo durante el partido que su equipo ganó por 14-21 a los Bears de Chicago conseguir el título de la Conferencia Nacional (NFL) y lograr el pase al Super Bowl XLV.
A pesar de la lesión, el entrenador de los Packers, Mike McCarthy, dijo no estar preocupado y considera que todo marcha conforme a lo planeado para que el equipo enfrente a los Steelers de Pittsburgh, por el título del campeonato de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL).
Rodgers presenta dolores en el hombro derecho como consecuencia de haber sido golpeado durante el primer cuarto cuando corrió una yarda para anotación y el defensa de los Bears, Danieal Manning, chocó contra el lado derecho de su cuerpo.
McCarthy reiteró que no estaba preocupado, y destacó que hasta cierto punto es normal que a estas alturas de la serie final todos los jugadores presenten golpes y moretones.
Explicó también que su mariscal de campo no tuvo ningún problema después del golpe que protagonizó casco contra casco con el defensor Julius Peppers, que preocupó a los Packers debido a que Rodgers tuvo dos conmociones al comienzo de la temporada.
Los Packers deben enfrentar a los Steelers el 6 de febrero en el "Cowboys Stadium", de Arlington (Texas), para decidir el cuadragésimo quinto título del Super Bowl, que sería el quinto que disputen en su historia con marca de 3-1 en los anteriores.
Mientras que para los Steelers será el octavo Super Bowl que disputan y buscaran el séptimo título después de haber ganado seis y haber perdido uno, siendo el equipo con la mejor marca de la historia de la NFL.