Chivas tenía una ventaja de un gol al vencer al equipo canadiense en su estadio, sin embargo, dicha agrupación quería ser campeón y el planteamiento en cancha fue diferente. Chivas inició con un gol de Orbelín Pineda e inmediatamente el Toronto se recuperó anotando dos tantos; uno por Jozy Altidore y otro por Sebastian Giovinco.
El marcador de los partidos disputados por estos equipos los mandó directamente a la ronda de penales y pese a que muchos comentaristas y fanáticos del futbol mexicano pensaban que todo estaba perdido por la "maldición de los penales", el equipo del Guadalajara se coronó campeón luego de que el Toronto fallara dos penales.
Con esta victoria el equipo de Matías Almeyda debe irse preparando para el mundial de clubes en donde tendrá que demostrar que su plantel se encuentra en un nivel futbolístico similar a los de los mejores equipos del mundo.