La investigación indica que el avión partió con el combustible al límite, o sea, con el tanque lleno pero sin la reserva necesaria como para volar una hora y media más.
Pese a que piloto y copiloto conversaron sobre repostar en Leticia, la frontera entre Brasil, Perú y Colombia, ello no ocurrió y entrando a tierra colombiana se encontraron con viento en contra, por lo tanto el avión necesitó más potencia y acabó vaciándose el combustible.
También se habla de que el avión viajó con exceso de peso. "Hemos calculado que la máxima carga era de 41.800 kilos y despegó con 42.148", se relata en el informe.
Esta es la primer investigación del accidente que acabó con la vida de 71 personas y se espera que derive en posibles denuncias judiciales. El informe definitivo se dará a conocer en abril.
Vía: EL PAÍS
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