El ruido que generó el enfrentamiento entre el América y el Cruz Azul fue más poderoso que el partido que presenciamos en la casa cementera. Ambos equipos mostraron que su nivel futbolístico no es el indicado a esta altura del semestre. La igualada (1-1) en el marcador es el reflejo del pobre nivel que ambas escuadras están desarrollando en la Liga MX.
El cuadro americanistas lució de mejor forma en los primeros 45 minutos del partido, sin embargo, el dominio que marcó y los constantes latigazos que lo pusieron en más de una ocasión ante el marco de "Chuy" Corona, sólo le redituaron en un gol -Christian Benítez-. La Máquina se salvó de irse al descanso al menos con dos goles en contra.
Para la parte complementaria, el cuadro de la Noria salió más concentrado y con mayor ambición que los dirigidos del "Piojo" Herrera. Con el pasar de los minutos, el Cruz Azul comenzó a tener mayor movilidad con la entrada de Maranaho por la banda izquierda. En un descuido de Diego Reyes, Mariano Pavone habilitó de buena forma al delantero amazónico quien sólo tuvo que mandar "la diagonal de la muerte" para que Javier Aquino empujara la esférica a las redes azulcremas.
El partido se hizo viejo, los jugadores no tuvieron la chispa que marcara la diferencia e inclinara el resultado para un bando. Intensidad y desgaste físico fue la tónica de un encuentro que quedó a deber en el espectáculo.
Hagamos un conteo de lo más relevante del partido:
1. Benítez pudo ser la diferencia en este partido, sin embargo, la falta de contundencia y el buen momento que vive "Chuy" Corona, le dieron la esperanza necesaria al cuadro de la Máquina para sacar un punto de su casa en lugar de terminar con la derrota.
2. Pasan las fechas y el equipo que tanto presume Miguel Herrera sigue siendo un reflejo de la irrealidad que vive el estratega americanista. El potencial del cuadro de Coapa dista de lo que el cuadro capitalino tendría que estar reflejando en la cancha. Después de la eliminación que el América sufrió en la Copa MX, lo mínimo que se esperaba era una actuación y entrega demandante. Sin embargo, el juego mezquino y dudoso se apoderó de nuevo de un cuadro que no encuentra la forma para poder implantar ese miedo que infundía en tiempos pasados a todos sus rivales.
3. Cruz Azul logró rescatar un punto después de regalar la primera mitad. Los cementeros siguen siendo un cuadro sin personalidad, son un equipo esperanzado a lo que pueda hacer el "Tanque" argenitno en la delantera; dejando de lado la asociación que en décadas pasadas les dejó los mejores años futbolísticos.
Cruz Azul no tiene un estilo definido, la mano de Memo Vázquez sigue sin aparecer en tierras cementeras, es preocupante ver a un histórico del futbol jugar sin motivación y sin deseo. El andar del Cruz Azul será sin brillo y sin emociones. Un estilo que los aficionados celestes tiene más que identificado y que siguen soportando en silencio.
4. El América se fue del Estadio Azul sin pena ni gloria. Se conformó con el empate. Es una pena que las Águilas no se entreguen a fondo para sortear de mejor forma los encuentros. La comodidad que se trasmite en la cancha americanista es preocupante, este estilo "comodino" es el reflejo de la mediocre planificación de la "espectacular" Liga MX. Todo equipo sabe que jugando a medio gas puede acceder a la fiesta grande del futbol mexicano. La liga sigue mostrando más carencias que mejorías.
5. Lo mejor del partido fue el ambiente en las gradas. Es de aplaudir que ambas aficiones a pesar de saber que las escuadras no andan en la mejor forma, su deseo y aliento a sus ídolos en ningún momento decayó. Si el calor que se vive en las gradas pudiera trasmitirse a la cancha, el Cruz Azul-América de esta tarde hubiera sido un partido excepcional.
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