LOS ÁNGELES.- Tras el escándalo por comentarios racistas hace tres meses, Donald Sterling, quien había sido dueño de los Clippers por más de 30 años, dejó de serlo el día de hoy cuando el juez autorizó la compra de Steve Ballmer por 2 mil millones de dólares.
Ballmer fue el presidente ejecutivo de Microsoft después de la dimisión de Bill Gates en el 2000. Previamente la NBA autorizó la oferta de Steve Ballmer por la franquicia de Los Ángeles, pero los continuos litigios obstaculizaron la venta durante unos meses.
Un personaje que es clave en esta historia es Shelly Sterling quien se encargó de que esta compra-venta fuera un éxito, a cambio ella fue denominada oficialmente como la fanática número 1 de los Clippers. Claro, sin el consentimiento de Donald Sterling quien agotará todos los recursos para evitar la consumación, pero ya será imposible a partir de hoy.
La respuesta de la plantilla ha sido aceptable, pues no importa quien llegará, si no quién se iba. Chris Paul, ofendido por los comentarios del mes de mayo por parte de Sterling, fue de los primeros que mencionó que no podía seguir al frente del equipo aunque fuese suyo.
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