Redacción de EE.UU., 23 dic (EFE).- La mezcla del cansancio y la inspiración encestadora de los reconstruidos Magic de Orlando fueron las claves que dejaron a los Spurs de San Antonio con la peor derrota en lo que va de temporada después de perder por paliza de 123-101 y romper racha de 10 triunfos consecutivos.
Por primera vez en los tres partidos que llevan disputados los Magic con sus nuevas adquisiciones de los escolta Gilbert Arenas, Jason Richardson y el alero turco Hedo Turkoglu, el equipo respondió con un ataque imparable.
Junto a ellos el pívot Dwight Howard impuso su poder bajo los aros y se convirtió de nuevo en el líder indiscutible de los Magic que tuvieron a siete jugadores con dobles dígitos y un 59 por ciento de acierto en los tiros de campo.
Howard aportó 29 puntos con 14 rebotes, mientras que el ala-pívot Brandon Bass y el escolta reserva J.J.Redick anotaron 17 tantos cada uno para los Magic (17-12), que ganaron por segunda vez en los últimos 10 partidos y rompieron una segunda racha de cuatro derrotas consecutivas.
Richardson que llegó de los Suns de Phoenix; Arenas, de los Wizards de Washington y Turkoglu, que llegó también del equipo del estado de Arizona, aportaron 15, 14 y 11 puntos, respectivamente, para por primera vez contribuir en el juego y el triunfo de los Magic.
Arenas también aportó seis rebotes e hizo buena labor en apoyo al base Jameer Nelson que no volvió a tener problemas estomacales, mientras que Richardson acertó con los triples y Turkoglu volvió a entenderse a la perfección con Howard.
Los Spurs, que llegaban de enfrentarse la noche anterior ante los difíciles Nuggets de Denver, en la segunda parte sintieron los efectos del esfuerzo realizado y el cansancio iba a ser un factor en su contra.
El base francés Tony Parker y el reserva Gary Neal, con 16 puntos cada uno, encabezaron la lista de ocho jugadores que tuvieron dobles figuras, pero sólo un 42 por ciento de acierto en los tiros de campo.
Mientras que el alero-pívot Tim Duncan se quedó con sólo 12 y seis rebotes sin que fuese factor ganador para los Spurs, lo mismo que el escolta argentino Manu Ginóbili que anotó 10 tantos en 20 minutos que estuvo en la pista.
Ginóbili anotó sólo 3 de 10 tiros de campo, incluido un triple en tres intentos, y 3-4 desde la línea de personal, capturó cinco rebotes, repartió seis asistencias y puso un tapón.
La nota positiva para los Spurs y el entrenador Gregg Popovich fue el darle minutos a los reservas y entre ellos al alero novato, el brasileño Tiago Splitter, que se convirtió en el más eficaz en el juego de ataque e hizo buena defensa.
Splitter jugó 17 minutos para aportar 11 puntos después de anotar 3 de 5 tiros de campo y 5-6 desde la línea de personal, capturó cinco rebotes, recuperó dos balones y puso un tapón.
La derrota, primera que sufren los Spurs desde primeros de diciembre, los dejó con marca de 25-4, que sigue siendo la mejor de la NBA.
Los Magic, que habían perdido los dos primeros partidos disputados con sus nuevas adquisiciones -Hawks de Atlanta y Mavericks de Dallas-, volvieron a mostrarse como un equipo seguro y ganador.
El partido estaba decidido al llegar al cuarto periodo con un parcial de 97-67 que obligó a Popovich a sacar a los reservas y darle descanso a los titulares para ser la primera vez en lo que va de liga que los Spurs no estuvieron en la lucha por el triunfo en un partido.
El entrenador asistente de los Celtics de Boston, Lawrence Frank, estuvo como observador en el partido para tener todo listo cuando su equipo se enfrente el Día de Navidad a los Magic.
