El equipo de fútbol femenil de Chula Vista High no siempre es considerado un equipo de campeonato.
Los Spartans (espartanos) no siempre se consideran una potencia. A veces ni siquiera se mencionan entre los contendientes del condado de San Diego o de su propia liga.
No siempre tienen a jugadoras de equipos de clubes élite. De hecho, la mayoría de las niñas nunca han jugado en un club, pues casi ninguna puede darse el lujo de pagar las cuotas.
Pero eso no significa que Chula Vista no tenga jugadoras talentosas. Algunas pasan desapercibidas, sin ser descubiertas por posibles clubes y cazatalentos universitarios.
La entrenadora Carolina Soto tiene la esperanza de que eso no ocurra durante esta temporada. Existe el talento suficiente para llamar la atención.
Adrienne Bidwell sobresale de entre las demás.
Esta temporada la portera de los Spartans ha llamdo la atención.
Soto la considera una de las porteras más talentosas del sur de la bahía. Y la entrenadora alaba a Bidwell no sólo porque está en su equipo.
"Ella es una de esas joyas que recibes de vez en cuando", dijo Soto. "De las jugadoras que he entrenado ella es una de mis favoritas, porque trabaja duro en todo lo que hace. Es buena atleta y buena portera. Puede ser mejor, sólo que ella aún no lo sabe".
Soto dijo que los entrenadores de equipos rivales se le han acercado después de cada partido para alabar a Bidwell.
"'Oye, tu portera es muy buena, ¿para qué club juega?" dijo Soto que le preguntan. "Eso es lo que los entrenadores han comenzado a preguntar. Yo les contestó: 'éste es su club'".
Y también es su equipo.
Bidwell, de 17 años, es la capitán del equipo y sus compañeras de equipo la consideran una gran líder, alguien que las motiva.
Basta con preguntarle a su amiga Yolanda Sandoval.
"Mantiene a la gente en estado de alerta", dijo Sandoval, defensora de los Spartans. "Nos dice que debemos mantener la cabeza en alto cuando estamos decaídas. Es muy vocal. Hace bromas en el momento oportuno. Es una verdadera amiga y una gran inspiración".
Sandoval está agradecida por su amistad. Se conocieron en la escuela intermedia y han jugado juntas por tres años, pero sobre todo Sandoval está agradecida por el apoyo que su amiga le brindó en momentos difíciles.
Sandoval, de 17 años, dijo que Bidwell la apoyó después de un accidente automovilístico el pasado mes de febrero.
Bidwell y sus compañeras de equipo visitaron a Sandoval en el hospital mientras se recuperaba de heridas en los intestinos por la presión del cinturón de seguridad durante el choque.
Pero cuando Sandoval estaba lista para volver al campo, fue Bidwell quien ayudó a Sandoval a ponerse en forma.
"Ella estaba allí impulsándome a correr con ella", dijo Sandoval. "Adrienne nunca me abandonó. Si me quedaba atrás ella se quedaba conmigo. Nunca me dejó".
Ese es el tipo de persona que Bidwell se esfuerza por ser.
Bidwell, alumna de 12avo grado, acredita a su padre, David, por su motivación.
Su padre murió cuando ella tenía ocho años.
"Quiero ser la mejor en todo", dijo Bidwell. "No quiero ser una adolescente que no hizo nada. Si mi padre estuviera aquí, quisiera que él estuviera orgulloso de mí".
Su madre, Georgina, y su hermano mayor, Andrés, sin duda lo están. Bidwell, quien también forma parte del equipo de atletismo y campo traviesa desde hace cuatro años, hace suficiente para mantenerse ocupada.
Se despierta a las cuatro de la mañana. Necesita suficiente tiempo para arreglarse y transportarse a la escuela desde Jamul hasta Chula Vista, donde su madre trabaja como secretaria. Su primera clase comienza a las 6:30. Su última clase es a las 3:30 de la tarde, justo a tiempo para llegar a la práctica de 120 minutos.
Entonces es hora de estudiar. Hay mucha tarea cuando se cursan cuatro clases de Colocación Avanzada. Materias que cuentan para crédito universitario.
Bidwell, quien tiene un GPA de 3.8, ha llenado solicitud en varias escuelas del sistema de la Universidad de California. Tiene confianza en que será aceptada. Se esfuerza lo suficiente como para sentir que ha hecho todo lo que se puede.
Sea en San Diego, Santa Bárbara o Irvine donde sea aceptada, Bidwell planea estudiar justicia penal y hacer las pruebas necesarias para formar parte del equipo de fútbol de la escuela. Podría ser una tarea difícil, pues nunca ha estado expuesta a cazatalentos. Ellos no suelen acumularse en los juegos de los Spartans.
Bidwell no comenzó a jugar fútbol hasta como los nueve años. Su madre quería que fuera bailarina. Bidwell forma parte del equipo de baile de la escuela, pero el fútbol es su pasión. Es sólo cuestión de mostrar sus habilidades futbolísticas a las personas adecuadas.
"Eso es algo en lo que estoy trabajando para ayudarla", dijo su entrenadora. "Voy a hacer un video de ella. Tuve un entrenador de club que preguntó si podía jugar con su club. No estoy segura de que eso vaya a pasar, pero vamos a encontrar una manera de exponerla".
Una manera es aprovechar la temporada de la escuela secundaria. Los partidos de la Liga de Mesa comenzaron la semana pasada.
Los cazatalentos universitarios normalmente no vienen a ver a los equipos del sur de la bahía. Pero para suerte de los Spartans, Hilltop, uno de los equipos de mayor prestigio de la comarca, juega en la misma liga.
Tal vez esa sea la oportunidad para Bidwell.
Ella ha mantenido a Chula Vista de ser derrotado en muchos partidos este año. Algunos de sus mejores partidos fueron contra equipos ajenos a la liga durante torneos de principio de temporada.
El objetivo principal de Bidwell es ayudar a su equipo a ganar.
No importa si el equipo no es una potencia o si no siempre tiene a las mejores jugadoras. Los Spartans tienen su propio líder.
Ivan.orozco @ sandiegored.com