Ya sea por cuestiones taquilleras, Deadpool obtuvo la clasificación de B-15 cuando se estrenó en febrero del 2016, lo que permitió a mucho joven de secundaria y preparatoria entrar a verla, experiencia que no muchos disfrutaron.
Durante el tour de prensa en la Ciudad de México, Ryan Reynolds confirmó la clasificación de Deadpool 2 en el país, asegurando (vía Cine Premiere) que esto permite tener mucha más libertad en cuanto al contenido que quiere presentar.
Incluso, Cinépolis advierte de dicha clasificación a la hora de vender los boletos en su aplicación móvil.

De hecho, según a varias reseñas, la película cuenta con más contenido violento que la primera, así como más material para adultos.
En dado caso, es una victoria para todos aquellos que no quieren estar soportando gritos y comentarios incómodos por parte de adolescentes.
Desafortunadamente, nuestra felicidad duró poco al descubrir que en efecto, Deadpool 2 es clasificación B-15.