Chicago, 20 may (EFE).- Radio Arte de Chicago corre el riesgo de desaparecer por falta de recursos y con ella una oportunidad única en Estados Unidos de capacitar gratuitamente a jóvenes latinos bilingües en la producción de programas radiales.
La emisora comunitaria que comenzó sus actividades hace 14 años en el barrio latino de Pilsen, suroeste de la ciudad, "es un barco que se hunde", según dijo a Efe uno de los jóvenes voluntarios que trabajan en su programación.
Con el preaviso de que los fondos que la mantienen se han secado, y que la crisis financiera puede arrastrar inclusive al Museo Nacional de Arte Mexicano (NMMA) que ha sido el propietario desde 1997, la emisora necesita ser rescatada con urgencia.
"Necesitamos un plan para no perder la licencia y mantener la emisora al aire", dijo Jatziry García, uno de los voluntarios que solicitó una reunión urgente con el fundador y presidente del museo, Carlos Tortolero, "para saber exactamente dónde estamos y qué podemos hacer".
Las posibilidades parecen lejanas ya que Tortolero anunció esta semana que para el museo eran "insostenibles" los gastos de mantenimiento del edificio y programación de WRTE-FM, más conocida como Radio Arte 90.5.
El museo busca vender el edificio de 3.400 metros cuadrados en dos plantas ubicado en la esquina de las calles 18 y Blue Island, además de la frecuencia que interesa a las universidades DePaul y Northwestern.
En el edificio funcionan los estudios de Radio Arte y el programa de arte Yollocalli, donde los jóvenes aprenden pintura y fotografía y exponen en una galería propia.
Radio Arte ofrece programas de capacitación de un año y medio de duración a jóvenes de entre 15 y 21 años, con la posibilidad de manejar equipos técnicos y experimentar "al aire" en una amplia programación que abarca desde política a inmigración, deportes, literatura, género y temas del colectivo LGBTQ.
Todos los años se escogen 30 jóvenes entre los aspirantes, que aprenden a escribir guiones, investigar, entrevistar y presentar programas en vivo como locutores.
En su mayoría son la primera o segunda generación de inmigrantes que pueden practicar en el programa First Voice cuando dominan el inglés, o Primera Voz cuando su fuerte es el español.
Asimismo, la emisora promueve la música latina, el rock en español y sonidos emergentes como música electrónica y punk.
Su lema es "Sonidos que inspiran el cambio" y el contenido de sus programas busca promover "el periodismo responsable y la justicia social".
La emisora ha ganado premios y honores periodísticos, inclusive uno otorgado por la Casa Blanca en 2004.
Según Tortolero, la capacitación de los jóvenes no se perdería sino que sería transferida a centros comunitarios y otros lugares de la ciudad que han ofrecido su colaboración, mientras que la actividad artística se ubicaría en el parque Harrison, contiguo al museo.
Jesse Ruiz, miembro de la junta directiva del museo, dijo que los problemas financieros comenzaron con los recortes de fondos públicos que recibe la institución y que "es un problema común de otros museos importantes" del país.
Tortolero dijo que el museo, que él fundó en 1982 y es el único de propiedad latina acreditado por la Asociación Americana de Museos, buscó financiación bancaria para sus problemas, "pero la respuesta fue que debíamos achicarnos".
"Nosotros queremos formar una cooperativa para mantener la frecuencia, el nombre, la licencia y el trasmisor", dijo Martín Macías, otro de los voluntarios que integra la campaña en busca de apoyos financieros.
El tema de la frecuencia es clave, dijo Jatziry García, porque en Chicago ya no se otorgan más licencias de radio aunque sean de corto alcance.
Radio Arte cubre actualmente un radio de 20 kilómetros, en un área de no más de 500.000 habitantes, que en su mayoría son latinos.
García dijo además que si la frecuencia es vendida a una universidad, la emisora se mantendrá fuera del espectro comercial pero los jóvenes latinos "perderán un vehículo educativo, que además es plural y diverso".