Roger Tullgen, de 42 años, tiene cabello largo y oscuro, tatuajes, y viste de negro con joyería de cráneos y huesos. Su amor por el género de rock nació cuando tenía dos años y escuchó el álbum de Black Sabbath de su hermano. Según un periódico local, consultó a tres especialistas con el fin de validar su condición para que se le permitiera continuar con su estilo de vida aún dentro del campo laboral.
"Hace 10 años que he intentado clasificar esto como una enfermedad", comentó, "hablé con tres psicólogos y finalmente aceptaron que necesito esto para no ser discriminado."
Su nuevo trabajo de medio tiempo como lavaplatos en un restaurante de la ciudad de Hassleholm, sumado al soporte económico, le facilitará mantener sus hábitos compulsivos. Su jefe ha aceptado concederle descansos para asistir a eventos musicales, llevar el atuendo que desee y escuchar música en el local, mientras que ésto no moleste a los clientes.
"Ahora puedo presentarme a cualquier entrevista de trabajo vestido con mi ropa normal y sólo entregarles este documento", agregó.
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