Fairfax (Virginia), 15 jul (EFE).- El grupo mexicano de rock Maná pidió anoche a sus miles de fanáticos latinos que digan "no al racismo" en EEUU y "nunca olviden sus raíces", durante un concierto de su gira que ha superado, incluso, los auditorios de artistas como Lady Gaga.
"Nunca olviden sus raíces…debemos seguir luchando contra esos pinches putos racistas", dijo el vocalista de la banda, Fernando Olvera, "Fher", ante un auditorio de cerca de 10.000 personas en el "Patriot Center" de la Universidad George Mason en Virginia.
"Estas banderas que ven aquí son símbolo de la unidad latinoamericana", dijo el artista, ondeando una enorme bandera mexicana.
El concierto "Drama y Luz", que agotó las entradas, tuvo un inconfundible toque de activismo a favor de la protección del medio ambiente pero, sobre todo, a favor de los derechos de los inmigrantes en Estados Unidos.
Fher expresó optimismo sobre "las reformas que se han hecho aquí", pero pidió luchar contra lo que consideró una ola racista contra los inmigrantes en este país, donde los mexicanos componen alrededor del 60 por ciento de la población latina.
El vocalista también agradeció la presencia entre el público a asesores del equipo del presidente Barack Obama, que el grupo apoyó en su campaña electoral de 2008.
La banda tocó la vena nacionalista de miles de mexicanos en el auditorio, que rugieron y ovacionaron al vocalista cuando gritó su conocida consigna de "¡Viva México cabrones!", y felicitó a la selección mexicana por su triunfo en el campeonato mundial Sub17.
Otro de los momentos más destacados del concierto fue la implacable actuación, de casi siete minutos, del baterista Alex González, que incluso tocó de espaldas al público.
Durante el concierto, "Fher" dedicó el tema "Vuela libre paloma" a su madre -que falleció cuando el grupo grababa el disco-, "y a todos los que han perdido algún ser querido".
También, al azar, en un segundo escenario montado en la parte trasera del auditorio, escogió a una joven de entre el público y bailó con ella el tema romántico "Vivir sin aire", y también cantó un conocido bolero mexicano.
En el concierto de dos horas, el público, exaltado, además coreó varios de los temas más populares de Maná, como "En el muelle de San Blás", "Rayando el sol", "De pies a cabeza" o "Clavado en bar".
Fher alternó esos viejos éxitos con su más reciente, "Lluvia al corazón", que abrió el concierto y sirvió en abril para lanzar el álbum "Drama y luz".
Un grupo de jóvenes de México y Centroamérica que no paraban de gritar y tomar fotos con sus celulares, calificó de "excelente" el concierto y elogió el "llamado a la acción" de Maná.
"Pues yo les doy la razón porque hay mucho racismo y tenemos que construir un mundo mejor", dijo a Efe Wendy Rocinos, una joven de 22 años, nacida en EEUU de padres salvadoreños.
A su lado, el mexicano Alfredo Chavira, de 25 años, dijo que "hay mucha gente ignorante en este país y tienen que entender que no debe haber racismo".
Maná logró amasar recaudaciones sustanciales la semana pasada, detrás de U2 y Céline Dion, según ha indicado la revista "Billboard".
Al igual que en el "Patriot Center", la gira mundial que comenzó el pasado 16 de junio en Puerto Rico, ha logrado llenos completos en auditorios de Los Angeles (California), Miami (Florida), Chicago (Illinois), y las ciudades tejanas de Dallas, San Antonio y Houston.
La banda cruzará el Atlántico en septiembre para actuar en 7 localidades españolas: Murcia, Málaga, Madrid, Bilbao, Barcelona, Las Palmas de Gran Canaria y Tenerife.