San Juan, 16 ago (EFE).- El Museo de Arte de Puerto Rico expone el violonchelo Vuillaume que acompañó al músico español Pablo Casals durante su exilio en la isla caribeña, tras un minucioso trabajo de restauración.
La directora ejecutiva del Museo de Arte de Puerto Rico, Lourdes Ramos, presentó hoy el instrumento, que se expondrá en la pinacoteca de la capital hasta el próximo mes de octubre después de un mes de trabajo a cargo del maestro lutier Rodrigo Correa-Salas.
"En el Museo de Arte de Puerto Rico celebramos la oportunidad de mostrar al público el violonchelo que perteneció al maestro Pablo Casals por tantos años. El museo es un centro cultural multidisciplinario que alberga y respalda todas las manifestaciones artísticas", dijo Ramos.
"Se trata del violonchelo con el que nuestro maestro practicaba", destacó Ramos sobre el instrumento de Casals, que se instaló de forma definitiva en Puerto Rico a partir 1956, después de varias visitas previas a la isla, donde es considerado casi uno más por haber nacido su madre en ese territorio caribeño.
El administrador del Museo Casals de San Juan, José Delannoy, explicó que el violonchelo Vuillaume siempre acompañó al músico español durante sus años en Puerto Rico, tanto para clases magistrales como para conciertos.
"Practicaba tanto en su casa como en conciertos", indicó Delannoy sobre el violonchelo, parte de la colección permanente del Museo Pablo Casals de la Corporación de las Artes Musicales del Gobierno de Puerto Rico.
Correa-Salas subrayó por su parte que la restauración del Vuillaume fue un auténtico trabajo "a corazón abierto".
"El instrumento presentaba una pequeña raja en la parte trasera que hubo que restaurar", detalló el lutier puertorriqueño, tras recordar que la gran humedad del Caribe no ayuda a la conservación de este tipo de instrumentos musicales.
"El trabajo requirió de 34 días", dijo Correa-Salas, para quien la labor de restauración significó "anticiparse a que siguiera dañándose", dijo sobre un violonchelo de maderas de abeto y arce.
Recordó que Casals adquirió el instrumento durante las primeras décadas del pasado siglo XX en Francia.
Correa-Salas aclaró que el Vuillaume era más resistente que otro de los instrumentos principales del músico español, un Goffriller, que Casals evitaba traer a Puerto Rico debido a la gran humedad que se registra en la isla caribeña.
Ese detalle convirtió al instrumento que desde hoy se exhibe en el Museo de Arte de Puerto Rico en inseparable de Casals para sus prácticas y conciertos en la isla caribeña.
Imágenes del Festival Casals de renombrados fotógrafos como Fritz Henle, Vitas Valaitis, Tom Hollyman o Elliot Erwitt dan testimonio del uso que el artista español dio a ese violonchelo Vuillaume.
Casals llegó a Puerto Rico tras dejar la España franquista para quedarse definitivamente en 1956, tras haber visitado previamente la isla y la ciudad de Mayagüez, de donde era oriunda su madre.
El legado de Casals en Puerto Rico incluye, desde 1956, el Festival clásico que lleva su nombre, la fundación del Conservatorio de Música puertorriqueño (1959) y la creación de la Orquesta Sinfónica (1958).
