Con un auditorio en su mayoría compuesto por mujeres y un lleno casi total, Luis Miguel dio inicio a su gira 2011 en San Diego la noche del jueves en el Viejas Arena.
A pesar de los problemas de sonido con los que lidió durante las casi dos horas que duró su concierto, Luis Miguel bailó y bailó, mostrando una actitud rejuvenecida, aun cuando volvió utilizar su saco de terciopelo negro que lo ha venido acompañando durante varias giras.
Su escenografía por demás sencilla se iluminaba con la imagen del cantante en tres enormes pantallas que dejaban ver su ya tradicional piel bronceada que además resaltaba su dentadura ultra blanca.
Al inicio del concierto, una joven se acercó al escenario para entregarle un ramo de rosas rojas con el que cantó la primera canción.
Tal y como lo hizo en su concierto de Las Vegas el pasado septiembre, sacó un medidor de gritos invitando a la fanaticada a medir sus emociones, provocando una gran participación de la gente, que alcanzó los más altos niveles marcados por dicho aparato.
El momento más animado de la noche fue cuando Luis Miguel interpretó su típico popurrí con sus éxitos "No culpes a la Noche", "La Chica del Bikini Azul", "Isabel", "Ahora te Puedes Marchar", "Qué Nivel de Mujer", entre otras que puso a bailar a sus seguidores.
Fue con su nueva canción "Tres Palabras" con la que empezó el romanticismo para seguir con uno que otro bolero y baladas, entre las que aprovechaba para regalar unas cuantas rosas blancas a las que estaban en primera fila.
Además cantó un dúo virtual con Frank Sinatra interpretando el tema "Come Fly With Me" mientras en las pantallas se transmitía un video de la estrella estadounidense.
Sin mucha novedad y como ya es costumbre, sin haber invertido en su escenario, Luis Miguel se despidió de San Diego olvidando presentar y agradecer a sus músicos, pero dejando a sus fanáticos, se puede decir, contentos.
