MÉXICO.- Un artículo publicado en Sin Embargo, citando información de la Universidad de California en San Diego (UCSD), exhibe la situación a la que se enfrentan miles de niñas en la frontera norte de México y específicamente en municipios como Ciudad Juárez y Tijuana, donde la trata de blancas no es secreto.

Según el informe, una de cada cuatro mujeres que trabajan como sexoservidoras en ambas ciudades, comenzó a "vender" su cuerpo bajo presión siendo menor de edad. Además, una de cada ocho dijo haber comenzado a prostituirse antes de cumplir los 15 años.

La explotación sexual infantil es uno de los problemas que más daño ha causado a la juventud mexicana al haber disparado los casos de feminicidios y desapariciones forzadas en el país. Aunque el robo y secuestro no son la única forma en que estas mujeres ingresan a la vida laboral clandestina, pues UCSD encontró niñas de 8 años que fueron obligadas a prostituirse por voluntad de sus padres.

En todo el mundo, se estima que 2 millones de niñas viven como esclavas sexuales, de las cuales 70 mil radican en México. Las menores de edad suelen ser más atractivas porque se "venden" como vírgenes y en una sociedad predominantemente machista, que una mujer no haya sido tocada por otro les agrega valor.

Sin embargo, son ellas quienes más riesgo corren, ya que el precio aumenta todavía más si no se utiliza condón. Un tercio de las encuestadas admitió haber sido obligada a tener relaciones sexuales sin protección siendo menor de edad.

Por último, el reportaje señala que según el Diagnóstico Nacional sobre la Situación de Trata de Personas en México, este país cuenta con al menos 15 puntos "con alta incidencia de trata de personas".

En Baja California se identifican dos: Tijuana y Mexicali, pero estados como Sonora, Chihuahua, Guerrero y Quintana Roo también son vistos como focos rojos.

Para llevar a cabo el estudio, el equipo de investigadores sandieguinos viajó a Tijuana y Ciudad Juárez entre marzo del 2013 y enero del 2014 con afán de visitar salones de masajes, clubes para caballeros e incluso parques públicos.

En estos lugares contactaron un total de mil mujeres que prestaban servicios sexuales y a ellas se les pidió responder una cuestionario a cambio de 20 dólares como agradecimiento por cooperar. El resultado fue publicado completamente en The Journal of the American Medical Association y puede ser consultado haciendo click aquí.

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Elizabeth.rosales@sandiegored.com