¿Alguien necesitaba en realidad un remake del clásico de 1959 de Ben-Hur? La respuesta es absolutamente no y esto se está viendo reflejado en la taquilla, pues la película dirigida por Timur Bekmambetov está perdiendo muchísimo dinero.

De acuerdo con THR, esta nueva versión del 2016 está encaminada en convertirse en la cinta con la mayor pérdida en todo el 2016, pues podría perder unos 120 millones de dólares o más, según fuentes cercanas a la producción y analistas de la taquilla.

La historia bíblica protagonizada por Toby Kebbell, Jack Huston y Morgan Freeman, ha recaudado poco más de 54 mdd alrededor del mundo. Expertos sugieren que con suerte podría llegar a los 75 millones, cuando se necesitó de 100 millones para hacerse, sin contar los gastos que se hacen para promocionar la película.

MGM será quien se lleve el golpe más grande, pues ellos pusieron el 80% del presupuesto.

[p]Y recordando lo que dijo Mel Gibson en una entrevista reciente, las cadenas de cine que exhiben la película se llevan la mitad de las ganancias, por lo que de esos 75 millones, los estudios sólo se llevarían unos 34.5 millones.

Ben-Hur no es el único perdedor del 2016, pero sí el que se lleva la corona. The Hollywood Reporter refleja que otras películas que perdieron dinero (o por lo menos no llegaron a las expectativas que tenían) son The BFG de Steven Spielberg y Disney, la cual recaudó 165.3 mdd globales, y se hizo con un presupuesto de 140 millones. La película perdería de 90 a 100 millones por pagos que se tienen que hacer a socios de Disney, la productora de Spielberg, Amblin Entertainment y otros gastos.

Disney se llevó otra derrota con Alice Through the Looking Glass, la cual significó una pérdida de 65 mdd para el estudio después de recaudar 295.4 mdd globales y se requirió de 170 millones para hacerse (más gastos de marketing, etc.).

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