La frontera entre México y Estados Unidos es uno de los pasos fronterizos donde más muertes de inmigrantes se registran, según el Proyecto Migrantes Desaparecidos, que depende de la Organización Mundial para las Migraciones, y que lista algunos de los corredores migratorios más fatales del mundo.

Las cifras más recientes del Proyecto Migrantes Desaparecidos muestran que en 2018 murieron 376 inmigrantes en el paso fronterizo entre México y Estados Unidos.

Ese año el corredor migratorio que más muertes registró fue el Mediterráneo con 2.242 decesos de migrantes, seguido por el continente africano, donde se registraron 1.386 muertes y América, donde hubo 512 muertes de inmigrantes.

El Proyecto Migrantes Desaparecidos rastrea incidentes que involucran migrantes, tanto de refugiados como de personas que buscan asilo, tanto de muertes como de desapariciones en el proceso de migración hacia un destino internacional, dice la página web.

En un reporte de noviembre de 2018, con cifras del 1 de enero al 30 de octubre de 2018, la frontera mexicano-estadounidense era el segundo corredor más letal (con 341 muertos) después del Mediterráneo, que para ese entonces registraba 1.978 muertes.

"Al menos 166 migrantes han perdido la vida tras haber cruzado la frontera desde México a Texas en 2018", decía el reporte de la OIM de noviembre de 2018, "casi la mitad de las 341 muertes registradas a lo largo de la zona fronteriza que se extiende más allá de Texas e incluye a los estados norteamericanos de Nuevo México, Arizona y California, como así también los estados mexicanos de Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila, Chihuahua, Sonora y Baja California".

Datos actualizados a diciembre de 2018 muestran que el número de muertes ascendió a 376 en la frontera sur de EE.UU.. En 2017 la cifra fue de 415 migrantes muertos en esta frontera; en 2016, 401; en 2015, 399; y en 2014, se registraron 306 muertos en el corredor migratorio de México y Estados Unidos.

El reporte de la OIM no establece la causa de las muertes de los inmigrantes. Tampoco calcula la tasa de mortalidad por cada 100.000 habitantes.

De los 376 inmigrantes muertos en la frontera de México y Estados Unidos, se presumen que 100 eran centroamericanos, 86 de América Latina y el Caribe, dos de Sudamérica, dos del Caribe, dos del sur de Asia y de 184 son de origen mixto o se desconoce su origen.

Además, 214 eran hombres, 20 mujeres y 4 niños, según cifras del Proyecto Migrantes Desaparecidos, que agrega que se desconoce el género de los otros 138 restantes.

Un reporte de 2017 llamado Fatal Journeys, la OIM dice que el cruce de la frontera entre México y Estados Unidos se ha vuelto cada vez más "peligroso y costoso".

"No es raro que los migrantes sufran una serie de deportaciones", dice el reporte sobre la situación en la frontera norte de México.

"Muchos no pueden regresar a sus comunidades de origen después de haber sido deportados debido a amenazas de violencia y circunstancias económicas insostenibles. Muchos simplemente giran a la derecha e intentan cruzar México, arriesgándose a la desaparición y la muerte con cada nueva apuesta de una vida mejor", agrega el informe.

Vía CNN español