El ahijado del expresidente panista Felipe Calderón y actual diputado local Carlos Torres se sumó al gobierno del morenista Jaime Bonilla para coordinar un proyecto de rehabilitación del centro histórico de Mexicali, una ciudad en donde radica por cuestiones profesionales en la cámara de diputados y por su cercanía con la alcaldesa electa por Morena: Marina del Pilar.

Torres es uno de los 7 diputados locales expulsados del PAN al aprobar la ampliación de gobierno de 2 a 5 años para el gobernador electo Jaime Bonilla.

Carlos Torres, candidato a la alcaldía de Tijuana que perdió contra Carlos Bustamante, ahora coordinará un proyecto turístico en coodinación con Alejandro Moreno, otro exfuncionario de administraciones de Acción Nacional.

Torres tratará de desarrollar el barrio chino, llamado Pequeño Cantón y Mexicali Rose. “Es la única ciudad desarrollada por la comunidad china en donde la delincuencia quiere adueñarse de esa zona y hay que convertirlo en un espacio que pueda ser un elemento de identidad para Mexicali”, explicó el diputado expulsado del PAN. “En 1920 había más chinos que mexicanos, había 17 mil chinos, mil 500 mexicanos y 700 japoneses y es una historia que se debe dar a conocer porque vinieron de una zona de Catón para trabajar en Mexicali”, dijo.

El Comité Directivo Estatal ha evitado pronunciarse sobre las decisiones de Torres y su cercanía con el próximo gobierno del partido Morena. Pero en Mexicali sí lo llamaron “traidor”.