Las disputas continúan con miras a la elección interna para renovar la dirigencia nacional de Morena. Se esperaba que en la sesión del Consejo Nacional del partido se llegara a un acuerdo sobre el método para la elección, sin embargo pactaron mesas de diálogo para decidir cuál será, solo encuestas o metodología mixta, la moneda sigue en el aire.

De lo que no hay dudas es de los aspirantes a dirigir Morena, son 4 y cada uno tiene una visión particular del método para la elección. Mario Delgado, Yeidckol Polevnsky, Bertha Luján y Alejandro Rojas Díaz Durán ya fijaron sus posturas, algunos acusaron injerencia de funcionarios del Gobierno Federal. ¿Quién los apoya en su búsqueda del liderazgo?

¿Primer pacto?

Entre los acuerdos alcanzados en el Consejo Nacional se decidió que en octubre se llevarán a cabo los congresos distritales en los que se realizará la elección de liderazgos, como lo marca la convocatoria del partido, y posteriormente en noviembre, se buscará implementar una encuesta que defina los postulados a la dirigencia en el Congreso Nacional, pero no para definir al nuevo o nueva presidente del partido.

Cabe destacar que método de elección deberá de estar definido antes del Congreso Nacional del 23 y 24 de noviembre.

Asimismo, se acordó que el proceso interno tendrá un padrón electoral de 2.6 millones de afiliados que registraron hasta noviembre del 2017, pese a las acusaciones de Polevnsky de que está “manoseado”.

Caso Luján y Polevnsky

En la reunión tanto Bertha Luján, presidenta del Consejo de Morena, y Yeidckol Polevnsky, dirigente nacional interina del partido, aseguraron que renunciarían a sus cargos a más tardar el 20 y 27 de octubre, en busca de contender por la dirigencia.

El presidente de México y fundador del partido, Andrés Manuel López Obrador dijo que no se meterá en la vida interna del partido, pero sugirió la realización de una encuesta con la que se eligiera al nuevo dirigente nacional, hecho que ha sido respaldado por la mayoría de los aspirantes. Sin embargo Luján busca impulsar la elección entre militancia, pues trasciende que no cuenta con el apoyo de muchos sectores de morenistas pero si con el supuesto apoyo del Gobierno Federal.

El dilema de la encuesta

En ese contexto, el coordinador de los diputados de Morena Mario Delgado, que también aspira a la dirigencia del partido, quien ha recibido el apoyo de gobernadores y exgobernadores, además de 200 de los 259 diputados de su bancada. Delgado pidió que no haya “simulación” en el padrón y que se acabe con la “politiquería”, así como escuchar a AMLO y que la elección se realice mediante una encuesta.

Por cierto, en algunos estados como Nayarit, surgieron movimientos bajo el lema “Yo sí escucho al presidente”, donde apoyan que sea una encuesta.

Por su parte Polevnsky, que hay que recordar, es otra de las que estaban de acuerdo con la sugerencia del presidente, no ve posible elección vía congreso. Aseguró que el padrón estaba “100% manoseado”, pues dijo, que pasó de un millón 800 mil, a 3 millones 100 mil militantes, pese a que la afiliación se cerró desde 2017.

Yeidckol dijo que acudirá ante el Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) para “ver qué procede, qué nos aconseja, ante un padrón manoseado que no da certidumbre”. Además trasciende que cuenta con el respaldo del actual secretario de Organización del Partido Leonel Godoy quien asumirá funciones de dirigente tras su renuncia.

Otro aspirante que desconfía del padrón es Alejandro Rojas Díaz Durán, quien es impulsado por Ricardo Monreal, desde un principio ha insistido en que se realice una consulta popular abierta o mediante 3 encuestas y 3 debates.

“El padrón de Morena está manipulado. Está rasurado y lo están haciendo a través de los siervos de la nación. Ése es el problema, que están interviniendo en varias entidades de la República, para favorecer a Bertha Luján en esta elección cerrada”, acusó.

Aunado a esto, Rojas Díaz Durán y Polevnsky acusaron la presunta injerencia de los delegados federales. La aún dirigente nacional señaló la supuesta intromisión de Gabriel García Hernández, coordinador General de Programas Integrales de Desarrollo del Gobierno Federal; en tanto Alejandro Rojas apuntó a los delegados federales de “acarrear” gente en seis estados del país para llevarlos a las asambleas distritales del partido.

*Vía Laura Arreazola/Político.Mx.