Las probabilidades de morir joven si duermes más de diez horas según estudios

La ciencia descubrió que la diferencia entre tener un sueño reparador y un sueño mortal es de una hora de diferencia

Dormir de más vs dormir de menos

Dormir menos de siete horas puede alterar seriamente los procesos tales como la sinapsis, viéndose afectada la memoria, la capacidad de aprender y, muy curiosamente, el éxito en el proceso de pérdida de peso. Sin embargo, dormir mucho trae consecuencias mucho más graves que las anteriores.

La cantidad ideal de horas para dormir todas las noches es entre siete y nueve horas.

Las personas que se exceden de diez horas corren riesgos de sufrir enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares. Esto aumenta la posibilidad de morir de forma prematura en un 30%.

Cada hora te acerca más a la muerte

El asunto no termina allí, sino que cada hora de más que duermes hace que tu riesgo de morir a causa de un accidente cerebrovascular o de un ataque cardíaco.

Durante años se intentó descubrir qué era lo que causaba la muerte tan repentina de la que nos hacen víctimas los accidentes cerebrovasculares. Ahora se sabe que una predisposición genética es una de las causas, la alimentación juega un rol preponderante en su aparición y ahora se ha descubierto que el exceso de sueño es también una causa que puede hacerlos detonar.

Las enfermedades coronarias y sus riesgos

Las enfermedades coronarias representan un alto riesgo de mortalidad en la población. Los médicos se han enfocado a advertir acerca de los riesgos de una mala alimentación. Sin embargo, pocos son los que controlan y hacen recomendaciones acerca del tiempo y de la calidad del sueño a sus pacientes.

Padecer de una enfermedad al corazón puede ser algo silencioso que nos provoque la muerte sin siquiera saber que estábamos sufriendo de ella.

Cómo contrarrestar los efectos del sueño

Es posible que duermas más de diez horas al día porque te encuentres cansado. Pero seguramente durante el día tu cuerpo no se sienta como el de una persona que ha tenido un sueño reparador. Por lo tanto, hay que ajustar otros factores para que no necesites dormir tanto.

En primer lugar, la calidad de tu sueño es primordial. Debes dormir en un lugar oscuro, silencioso, sin interrupciones y no ir a la cama con el estómago lleno ni beber agua antes de dormir.

En segundo término, es importante cuidar lo que comemos, ya que si recibimos la cantidad adecuada de nutrientes, no hay razón para necesitar dormir de más.

Por último, es necesario controlar el estrés para que este no se apodere de tu sueño y te arrebate tu preciada salud.

*Vía Fentigo

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