Pandemia, crisis económica, manifestaciones, avispones gigantes, terremotos, polvo del Sahara… y aún así hay personas que se las ingenian para hacer sus vidas, y las de los demás, más complicada de lo que debería ser.

El día de ayer, un hombre con un fusil semiautomático impactó su vehículo en la entrada de una Walmart en Red Bluff, California. Una vez que realizó esta entrada, comenzó a disparar: dos persona murieron y otras cuatro terminaron lesionadas.

De acuerdo con información de las autoridades de California, Louis Wesley Lane de 31 años de edad fue despedido hace poco más de un año de la misma Walmart que recibió sus ataques. No sólo disparó al edificio, sino también al estacionamiento. Cuando los policías llegaron no se detuvo, sino que también comenzó a dispararles.

Según informa el Jefe del Departamento de Policía, hubo un intercambio de entre 20 y 30 disparos, varios de ellos impactaron al atacante y tan pronto llegó al hospital fue declarado muerto. Asimismo, un empleado y ex compañero de Wesley Lane fue una de las víctimas mortales.

Por el momento, se desconoce el estado de salud de las demás personas que recibieron impactos de balas, así como el de la persona que arrolló con el auto antes de estrellarlo con el edificio.

Con este, ya es el tercer tiroteo en lo que va del año que tiene como escenario una tienda Walmart en Estados Unidos. El primero sucedió el 24 de mayo y el segundo el 16 de junio.

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