Nueva York, 28 ene (EFE).- Una fábrica de tortillas en la ciudad de Nueva York, donde el pasado lunes murió un inmigrante guatemalteco, fue cerrada por el Estado porque operaba sin seguro de compensación por accidentes a sus trabajadores.


La Tortillería Chinantla, en el condado de Brooklyn, dejó de pagar el seguro desde marzo de 2010, que cubre gastos médicos y el salario de un trabajador enfermo o herido tras un accidente en el empleo y fue cerrada el pasado martes, según trascendió hoy a los medios de comunicación.


La empresa había acumulado multas desde entonces por 56.000 dólares.


Tras la muerte del guatemalteco Juan Baten, de 22 años, inspectores de una agencia del gobierno estatal encargada de la protección de trabajadores se presentaron a la fábrica con una orden que le obliga a cesar sus operaciones hasta que emitan un nuevo aviso.


Es la primera falla que la agencia del gobierno detecta en la Tortillería Chinantla, donde el pasado lunes Baten cayó dentro de una mezcladora donde se preparaba la masa para las tortillas, señala The New York Times en su edición digital.


El inmigrante indocumentado, que trabajó por unos seis años en la fábrica, tenía una hija de siete meses con su pareja Rosario Ramírez.


Sus restos fueron velados el jueves en una funeraria de Brooklyn y la tormenta invernal no impidió que otros inmigrantes acudieran para el último adiós.


El dueño de la fábrica, Erasmo Ponce -un conocido emigrante mexicano-, aseguró a los medios que la muerte de Baten fue el primer accidente que ocurre en su empresa y que se debió a "un error humano" y no relacionada a condiciones en el empleo.


Sin embargo, el activista Daniel Groos, director de la organización Brandworkers asegura que se debió a las condiciones en que se ven obligados a trabajar los obreros en esa industria.