Chicago, 23 feb (EFE).- El alcalde electo de Chicago, Rahm Emanuel, anunció hoy una auditoría general en todos los departamentos del municipio con la promesa de "un nuevo comienzo" para enfrentar los graves problemas del gobierno que asumirá el 16 de mayo.


"Quiero conocer al detalle cómo se gasta el dinero del presupuesto", dijo Emanuel en su primera conferencia de prensa después de ganar la elección en la primera vuelta con el 55 por ciento de los votos.


Emanuel comenzó el día bien temprano con una visita a una estación de trenes urbanos para saludar a quienes llegaban al centro a trabajar, oportunidad en la que fue aplaudido y hasta abrazado por algunas personas.


Luego, en el Union League Club, habló con periodistas sobre la integración inmediata de un equipo de transición que trabajará con la administración del alcalde saliente Richard M. Daley.


"No olviden que Daley será el alcalde hasta el 16 de mayo, y no quisiera interferir", dijo Emanuel, quien agradeció las felicitaciones y ofertas de colaboración recibidas "desde el quinto piso", que es donde se ubica el despacho del alcalde en el edificio municipal.


El retiro de Daley cerrará un extenso capítulo de la historia política de Chicago iniciado por su padre en 1955.


Con un intervalo de 14 años, Daley padre e hijo implantaron una verdadera dinastía al gobernar la ciudad durante 42 años.


Emanuel dijo que su gobierno estará abierto a la colaboración de los interesados en el servicio público, y en particular destacó su intención de formar "una nueva asociación" con el Concejo Municipal.


"Los concejales tienen que hacer mucho más que homologar lo que quiere el alcalde, tienen que ejercer un papel activo de fiscales del presupuesto y de las designaciones en los puestos clave", agregó.


Por lo menos nueve de los 50 distritos en disputa en las elecciones municipales no fueron decididos en la primera vuelta, entre ellos el 25 del mexicoamericano Daniel Solís, quien disputará la segunda vuelta el 5 de abril contra el dirigente comunitario Cauthémoc Morfin.


Otros seis concejales latinos consiguieron la reelección, y en la secretaría municipal la ganadora fue la mexicoamericana Susana Mendoza, quien abandonará la cámara de representantes de Illinois después de diez años.


Emanuel dijo que está "abierto para recibir ideas" sobre cómo enfrentar la crisis de presupuesto, los problemas crónicos de la educación pública, de infraestructura del transporte y de seguridad, con un departamento policial que no puede cubrir vacantes por falta de fondos.


"La prioridad es que los niños vayan a la escuela preocupados por sus estudios y no por la seguridad", dijo.


Las promesas de campaña son muchas, y algunas anticipan una lucha dura con los sindicatos porque contemplan recortes de 500 millones de dólares en el presupuesto o la reducción de beneficios recibidos por los trabajadores municipales en los seguros de salud y pensiones.


Otros anuncios fueron una congelación del gasto de 75 millones de dólares desde su primer día en el trabajo, y la posibilidad de no cobrar en su totalidad el salario anual de 216.000 dólares que le correspondería como alcalde.


"Esta será una oportunidad de dar vuelta la página y de un nuevo comienzo", dijo el alcalde electo.


El triunfo contundente de Emanuel en la primera vuelta confirmó los pronósticos de las encuestas y sorprendió a sus rivales.


Según los primeros análisis, Emanuel ganó en 40 de los 50 distritos de la ciudad, no solo con el apoyo de votantes blancos sino en barrios de población predominantemente afroamericana.


El voto latino del suroeste de Chicago donde está el barrio mexicano La Villita fue para el abogado Gery Chico, quien quedó segundo y a distancia con 24 por ciento de la votación.


El tercer lugar, con poco más del 9 por ciento, correspondió al actual secretario municipal Miguel del Valle.