Honestamente es el capítulo que había estado esperando. La última vez que vimos al Gobernador se había convertido en un monstruo que incluso mataría a su propia gente. Sabiendo que el actor David Morrissey regresaría a la serie durante su cuarta temporada, quedaban algunas preguntas sobre su personaje. ¿Dónde había estado todo este tiempo? ¿Cuándo regresaría? ¿Cómo? y muy importante, ¿Acaso podría regresar del lado oscuro?

Por lo regular son este tipo de capítulos de "The Walking Dead" los que mejor funcionan, centrandose en una sola historia, y en este caso teniendo un solo personaje central. Sin embargo, cabe mencionar que la manera en que muestran al Gobernador es muy interesante, ya que no podría alejarse más de lo que vimos en los comics, y en general, funciona para beneficio de este episodio. Habiendo dicho esto, tenemos que preguntarnos, ¿queremos ver una historia de redención para tan nefasto personaje? Yo creo que si. No será algo fácil, pero es más interesante que sólo ver la continuación de los eventos de la temporada pasada.

Teniendo eso en cuenta ahora nos preguntamos ¿cuál es la mejor manera de hacer esto? Es un poco obvio tener una niñita en el episodio que casualmente lo ve como si fuera su padre, digo, la pérdida de su hija ha sido la única faceta empatizante en la temporada anterior. Y aunque los humanos somos muy predecibles, el Gobernador no ha mostrado nada anteriormente que muestre que es capaz de autorecriminarse nada, aunque bueno, nunca había caído tan bajo a como lo vimos al final de la temporada pasada. La transformación de loco psicópata a "uno de los buenos" se sintió un poco apresurada, si entiendo que es televisión y que era necesario hacerlo así, pero entonces ¿porqué no hicieron algo parecido con Michone?

El episodio estuvo muy cuidado y enfocado en los detalle. Desde el casting hasa la selección de música. Sin embargo, ver a un Gobernador preocupado con castigarse en lugar de buscar venganza fue algo que no esperaba en absoluto. Otra cosa que me llamó la atención fue lo perturbadores que fueron los zombies de ésta semana. Desde el viejo soldado en la tina, hasta los vistos en el asilo de ancianos. El sentido de soledad que reflejaban iban muy ad hoc con la mentalidad actual del Gobernador.

A final de cuentas el episodio le dió una nueva faceta al que ay era uno de los personajes mejor escritos de la serie, aunque fuera una un poco controversial. Las historias se vuelven más interesantes cuando el personaje principal tiene algo que perder. "Brian" tiene todo para perder ahora. No es sólo a la niña, si no también la única oportunidad de recuperar su humanidad. Su promesa de cuidar a Megan hace eco a la promesa que hizo anteriormente y que falló en cumplir. Esto lo hace un individuo aún más perligroso que antes y a la vez más vulnerable que nunca.

El tema de "regresar" sigue como algo recurrente, y no sólo es como un viaje personal, literalmente está regresando a la prisión donde se encuentra el otro grupo de sobrevivientes. No creo que porque haya tenido un cambio de actitud sea bien recibido, almenos Michone no se ve como el tipo de persona que lo perdonaría, eso sin contar como reaccionarían Rick y los demás. Lo que si me queda claro es que al menos en mi caso, de haber una confrontación, no sabría a que lado apoyar, ya que el Gobernador es de mis personajes favoritos.

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jorge.guevara@sandiegored.com