Se dice que la banda Peruana Los Saicos inventó el punk en la década de las los 60's, y curiosamente cuando uno piensa en música punk o garage, lo primero que viene a la mente no es Latinoamérica. Décadas después el grupo Puerto Riqueño de garaje punk Dávila 666 vino a cambiar esto, dándose a conocer en pocos años como uno de los mayores exponentes del género en nuestro continente. De aquí se desprende AJ Dávila con su disco debut Terror Amor bajo el sello de Nacional Records, y con esta nueva propuesta musical, AJ vuelve a cambiar las reglas del garage punk llevandolo a lugares poco explorados en América Latina y el mundo.

A primera escuchada Terror Amor ataca con guitarras distorsionadas, coros armonizados y batería sencilla pero ruidosa. Producido de manera lo-fi (low fidelity) la voz aguda de AJ lleva la batuta a lo largo de las 14 canciones que abarcan los temas típicos del género: rebeldía, amor y el fin de la juventud. Lo que separa a AJ Dávila del resto de los músicos garaje o punk es su habilidad para escribir e interpretar grandes melodías, dándole una ventaja pop. Son canciones para cantar, en el carro, en la casa, en tu cabeza. Es un garaje pegajoso, en veces acompañados con toques de modernidad que vienen en la forma de sintetizadores y efectos de voz.

Duro Como Pierda, la tercera canción engloba perfectamente lo que AJ trata de hacer con este disco al usar acordes de guitarra sencillos que evocan a las mejores canciones de grandes bandas como Black Flag o The Stooges, pero al entrar la voz distorsionada nos damos cuenta de las influencias más contemporáneas de hip hop y música electrónica como si se tratara de Kendrick Lamar o María y José . Estos detalles poco ortodoxos dentro del género son lo que en verdad le da vida a Terror Amor, haciendolo accesible para fans del garage y nuevos escuchas.

Pero AJ y su grupo no hacen todo el trabajo, más de la mitad de las canciones incluyen colaboraciones con otros músicos de Puerto Rico, Costa Rica, México y Chile. Idealmente este disco sería un excelente catálogo de talentos latinoamericanos, pero aquí es donde también se da a conocer una de las pocas debilidades del disco. 2333, una canción sobre la desilusión tiene un monótono pero lindo coro por parte de Meche Oller de Las Robertas, mientras que la invitada Juanita Calamidad le da nueva vida al disco en Espina Dorsal, el penúltimo tema que sirve como clímax con sus versos acelerados y letra pasional. Selma Oxor de México contribuye también en la mayoría de los coros. Estas colaboraciones se aprecian bastante, pero algunas otras dejan mucho que desear.

En la canción Ya Sé, Dax Díaz y el cachanilla Juan Cirerol acompañan a AJ, y a pesar de que la canción es de las mejores del disco, estas colaboraciones se ven truncadas por la decisión estética de grabar las voces en baja calidad. Lo que no será, una canción en la que grabó el cantautor Chileno Alex Anwandter también resulta ser de las mejores del disco, pero la voz popera de Alex se pierde en el fondo. Esta es una queja solo para los que estarán ansiosos de escuchar las colaboraciones, ya que independientemente el disco sigue sobresaliendo, mas no la obra Latinamerican all-stars que algunos esperábamos.

Oscilando entre el punk con solos de saxofón (Noches Negras) y las baladas que evocan a The Byrds (Michelle), Terror Amor es un disco que ofrece una nueva variedad dentro del garaje rock sin alterar el sonido que distingue a este viejo género que lleva regresando al oído colectivo de la gente desde que The Strokes levantaron sus instrumentos hace 15 años. Es un verdadero logro el tomar un género que ha permanecido intacto desde hace más de 30 años, y más para un artista Latinoamericano. Al pensar en punk o garaje, lo primero que viene a la mente no es Latinoamérica, eso es, hasta que escuches Terror Amor de AJ Dávila. Altamente recomendable.

Para escuchar algunas de las canciones de este disco haz click aquí.

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