Apenas conozco a Manuel, pero sé que llevó a sus hijos al parque este fin de semana, y que se comió un helado de frambuesa […] A Elena tengo tiempo que no la veo, pero me da gusto saber que está esperando su segundo bebé. Y mientras me entero de la vida personal de otras personas, Roxana pide ayuda a todos porque no sabe si desayunar chilaquiles o hot cakes.

¿Te suena familiar? Este fue un momento que capturé al azar de mi muro de Facebook, pero fácilmente pudo haber sido el tuyo. Los latinos figuramos entre los grupos que más utilizamos el sitio de redes sociales más popular del planeta.

De hecho, entre el 2010 y 2011 el número de hispanos en Facebook aumentó en un 214 por ciento. Es más, de los 34 millones de hispanos que están en internet hoy en día, el 70 por ciento usa Facebook. Y no es de sorprenderse. Los latinos somos muy sociales, nos gusta hablar y también nos gusta enterarnos de chismes (o cómo explicar tanto programa de chismes en la televisión).

En el mundo del marketing digital, donde me desempeño cuando no estoy escribiendo en este espacio, me topo constantemente con ese tipo de datos. Pero hay algo que pocas veces escucho: ¿cómo comportarnos en esta comunidad digital cuyas acciones tienen consecuencias en la vida real? Se me ocurrió preguntarle a varias personas cuáles serían sus consejos de acuerdo con sus experiencias, aciertos y tropiezos, y esto fue lo que me dijeron:

Escoge a tus amigos cuidadosamente. Éste es un tema delicado. ¿Se debe incluir a gente del trabajo, conocidos o sólo familia y amigos? ¿Y si uno recibe una invitación de amistad de algún compañero de trabajo, se disgustará si no lo aceptas? Esta es una decisión muy personal, pero si has decidido incluir a todos tus conocidos, asegúrate de dividirlos en grupos para que controles lo que tú compartes con ellos. La clave es dividirlos bien desde un principio antes de que crezca demasiado la lista de amigos, y tener la disciplina de mantenerlos separados conforme vas añadiendo a gente. De otra forma puedes terminar compartiendo información inapropiada con gente que apenas conoces.

Cuida tu imagen. La foto con el rifle en una mano y una lata de cerveza en la otra quizás no será bien vista por algunos, como, digamos, un futuro empleador. Recuerda que las fotos en internet prácticamente viven para siempre, y son fácilmente encontradas y difundidas. Asegúrate de que tus fotos y descripciones no vayan a generar una mala impresión que pueda causarte problemas más allá de Facebook.

Ten cuidado con lo que publicas. Una amiga me estaba platicando que una conocida perdió su trabajo después de quejarse de su jefe en su muro de Facebook. Ella probablemente había olvidado que su jefe era su "amigo" en Facebook o quizás olvidó colocarlo en el grupo apropiado de amigos. De cualquier forma, le costó el empleo.

Sin embargo, los comentarios indiscretos también pueden generar una mala impresión de ti, aunque tu trabajo no dependa de ello. En otras palabras, no digas algo en Facebook que no dirías en persona. Puedes quedar mal. Muy mal.

Se cortés y educado. Si alguien te saluda en el supermercado o en la oficina, ¿tú correspondes el saludo? Si te encuentras con un conocido que cumple años, ¿lo felicitas? Lo más seguro es que sí. Lo mismo en Facebook. Si alguien te saluda en tu muro, o hace un comentario sobre algo que publicaste, considera dar las gracias o corresponder con un comentario. Una manera sencilla de corresponder a un comentario agradable es presionar en "Me gusta". La cortesía trasciende el mundo digital.

Disfruta a tus amistades. La clave del éxito de Facebook es su capacidad de conectarnos con las personas que son o que fueron importantes en nuestras vidas. Quizá te sorprenderá saber que a través de Facebook conocerás más a tus amigos y parientes ya que te enterarás de momentos especiales en sus vidas, aunque a veces sus comentarios sean triviales.

Ah, y una última cosa: ten cuidado con saludar a la ex novia en Facebook, porque por más inocente que sea el saludo, puede meterte en problemas con tu pareja. Y para aprender esa lección no tuve que preguntarle a nadie.

Hiram Soto es columnista de Enlace, el semanario en español de San Diego Union Tribune. editorial@mienlace.com