Yo soy un gran aficionado de las resoluciones de Año Nuevo. Me gustan porque el inicio de un año es el momento perfecto para escapar nuestra burbuja cotidiana y analizar nuestras vidas desde una perspectiva que nos permite establecer metas trascendentales.

Aunque muchos nos proponemos metas ambiciosas, como cambiar de trabajo, reestructurar las finanzas del hogar o perder peso, rara vez dedicamos el tiempo necesario para planear y elaborar estrategias para lograrlas. Esto no es algo que nos viene de forma natural a muchos de nosotros, y a pocos nos lo enseñaron en la escuela. Sin embargo, la planeación es la base para lograr nuestros objetivos.

Puesto que muchos solemos hacer planes al principio de cada año, quisiera aprovechar este espacio para compartir algunas de las tácticas y estrategias que utilizo como asesor de comunicación para compañías y organizaciones nacionales. Las he adaptado para que tengan más sentido a nivel individual, y para que te ayuden a cumplir los objetivos en 2013.

1 Escoge metas claras: las metas ambiguas son más difíciles de cumplir porque el objetivo suele carecer claridad lo cual es más difícil hacer un plan para lograrlas. Por ejemplo, "este año voy a comer mejor" es demasiado general y ambiguo. Una meta más clara sería decir "este año comeré frutas y verduras todos los días". Asimismo, "este año obtendré un trabajo que me guste" es más específico que simplemente "este año cambiaré de trabajo". Para algunos podría parecer una distinción obvia o trivial. Sin embargo, comer frutas y verduras todos los días es algo que se puede medir de manera objetiva, mientras que comer mejor puede significar muchas cosas. Una vez que tengas tu meta clara, escríbela y colócala en un lugar donde puedas verla frecuentemente, como el refrigerador o tu billetera.

2 Desarrolla un plan: una meta sin un plan es una causa perdida; fácilmente te perderás en los detalles de tus objetivos, en las cosas que necesitas y en el balance de las prioridades. Si tu meta es, por ejemplo, comer frutas y verduras todos los días, hay que tener un plan específico para lograrlo. Para ello hay que planear cuidadosamente cosas sencillas pero importantes como dónde se comprarán las frutas y verduras, quién las comprará, cada cuándo, cuánto dinero se gastará, cuándo serán consumidas, cómo serán preparadas en las diferentes comidas del día, etcétera. Vale la pena tomarse unos momentos y escribir el plan en una hoja de papel para así ver el panorama completo y ajustarlo.

3 Anticipa obstáculos: la mayoría de los problemas se pueden resolver antes de que ocurran, y las personas más efectivas son aquellas que identifican los factores que puedan poner en riesgo el cumplimiento de sus metas y objetivos. En el caso de comer frutas y verduras, valdría la pena anticipar las cosas que podrían ocurrir durante el año que te impedirían seguir tu dieta. Por ejemplo, qué harías si sales de vacaciones o si te enfermas y no puedes consumir ciertas frutas y verduras. O si sabes que algunos días no tendrás tiempo de ir al supermercado a comprar frutas frescas. Quizás valdría la pena comprar frutas secas o jugos V8 que contienen verduras y que pueden guardarse por largos periodos de tiempo.

4 Ajusta tu plan: a veces las cosas no resultan como estaban planeadas, por lo tanto la flexibilidad es esencial para ajustar los planes y lograr los objetivos. Quizás aparece la oportunidad de un empleo que no necesariamente era el que más te gustaba, pero que podría ser la base para conseguir el trabajo que verdaderamente disfrutes. Lo importante es no perder de vista el objetivo final, y siempre seguir trabajando con eso en mente.

5 Cumple tus objetivos: sigue estos pasos sencillos y cumplirás muchos de tus objetivos. Independientemente de tus metas para este año, probablemente tendrás que hacer muchos sacrificios y ser disciplinado para así acercarte a tus objetivos. Estos pasos los puedes usar para todo en tu vida, desde vivir más saludablemente y organizar las finanzas del hogar, hasta dejar el cigarrillo y recibir una mejor educación académica. Si lo haces bien, pronto se convertirá en un estilo de vida.

¡Feliz 2013!