Washington, 23 ago (EFE).- Si las víctimas de acoso escolar suelen sufrir disminuciones en su éxito académico, el fenómeno se agudiza en los casos de estudiantes negros y latinos con alto rendimiento escolar, según un estudio presentado hoy.
El estudio, presentado en el 106 Encuentro Anual de la Asociación Sociológica Americana, pone de relieve el profundo efecto que el acoso escolar puede tener entre sus víctimas.
"Aunque el éxito académico está muy influido por el origen familiar y las características de las escuelas, nuestro estudio sugiere que también la experiencia de haber sufrido acoso escolar influye en los resultados escolares", dijo Lisa M. Williams, de la Universidad de Ohio y autora del estudio.
Esta influencia se ve más marcada, según el estudio, en sujetos pertenecientes a minorías.
"Hemos encontrado que el acoso escolar tiene implicaciones en el desarrollo académico independientemente del origen racial o étnico, pero parece causar un especial detrimento en sujetos de determinados grupos raciales o étnicos", añadió Williams.
El estudio se ha llevado a cabo a partir de datos nacionales representativos procedentes del Estudio Educativo Longitudinal de 2002 (ELS), que, entre otras cosas, preguntó a los estudiantes si sufrieron acoso escolar durante el curso 2001-2002, cuando los alumnos cursaban el décimo grado.
Williams y Anthony A. Peguero, coautor del estudio y profesor de sociología en la Universidad Politécnica de Virginia (Virginia Tech), compararon los logros académicos (GPA) de los participantes en el estudio en noveno grado, antes de sufrir el acoso, con los resultados obtenidos por el mismo grupo de estudiantes en el año 2003-2004, cuando estaban en duodécimo grado.
"El aspecto más sorprendente del estudio es el efecto considerablemente negativo que la intimidación tiene en los estudiantes negros y latinos con alto rendimiento", precisó Williams.
Williams y Peguero encontraron que los estudiantes negros que habían obtenido una media de 3,5 en su GPA en el noveno grado y sufrieron acoso en el décimo, experimentaron un descenso de 0,3 puntos en sus promedios de décimo segundo grado.
Pero el efecto de la intimidación es aún mayor en el caso de los latinos, ya que aquellos que habían logrado un 3,5 GPA en noveno grado y sufrieron acoso en décimo, vieron como sus promedios descendían medio punto dos cursos más tarde.
En comparación, los estudiantes blancos que se encontraban en el mismo caso, vieron descender sus notas en apenas 0,03 puntos.
"Los estereotipos sobre la juventud latina y negra sugieren un bajo rendimiento en la escuela, pero aquellos que no se ajustan a los estereotipos y obtienen buenos resultados pueden ser especialmente vulnerables a la intimidación escolar", subrayó la autora.
Williams agregó que responsables políticos y educadores deben pensar en el efecto que la intimidación tiene sobre el rendimiento estudiantil y les instó a invertir recursos en proteger a los estudiantes, lo que, según el estudio, tendría consecuencias positivas en el éxito académico, en especial el logro de las minorías raciales y étnicas.
De acuerdo con la investigación, los estudiantes que sufrieron acoso escolar en décimo grado experimentaron una disminución en sus notas de 0.049 puntos en los resultados obtenidos en duodécimo grado.
"Este efecto, aunque pequeño, es importante y sugiere que el acoso escolar influye negativamente en las notas de los alumnos, incluso después de haberlo sufrido en años anteriores, siempre teniendo en cuenta la situación familiar y las características escolares asociadas a los logros, que fueron variables controladas en el estudio", añadió Williams.
Las notas académicas (GPA) se registran en una escala de cero a cuatro.
La muestra a partir de la cual se ha realizado el estudio constaba de 9.590 estudiantes procedentes de 580 escuelas, incluyendo 1.150 asiáticos, 1.360 negros, 1.470 latinos y 5.610 blancos.