Phoenix, 8 ago (EFE).- Uno de los trece activistas declarados culpables en Arizona de un cargo menor por desobediencia civil durante una protesta contra la SB1070 dijo hoy que su único "delito" fue enfrentar al alguacil Joe Arpaio y haber protegido familias.
"Si acaso soy culpable es de haber defendido los derechos humanos, de haber evitado separaciones de familias", dijo Salvador Reza, conocido defensor de los jornaleros e inmigrantes en el sur de Arizona, en entrevista con Efe.
El 29 de julio de 2010, el mismo día que entraba en vigor la polémica ley estatal, más de 40 personas fueron detenidas cuando realizaban una cadena humana frente a una de las cárceles del alguacil del condado Maricopa interrumpiendo sus operaciones.
"Desde entonces el alguacil no ha llevado a cabo sus operativos en nuestros vecindarios, ha ido a sitios de trabajo pero no en las calles como antes lo hacía prácticamente cada mes", enfatizó el activista.
El pasado viernes se conoció el fallo judicial contra Reza y otros cuatro activistas, los últimos de una serie de tres juicios donde en total se enjuiciaron a 13 manifestantes.
Todos serán sentenciados el próximo 23 de agosto y enfrentan una pena máxima de cuatro meses en la cárcel.
Reza aseguró que apelará la decisión del juez.
Por su parte Arpaio dijo que Reza y sus compañeros quebrantaron la ley al crear una cadena humana y evitar que los oficiales entraran a la cárcel.
"La oficina del alguacil no tolerará actos de desobediencia civil y otras violaciones a la leyes", dijo Arpaio en un comunicado de prensa.