Tijuana.- Sus rostros tristes y figuras delgadas, casi frágiles, parecen las de unos niños. Sin embargo la fiscalía estatal los está relacionando con al menos 27 violaciones de mujeres, principalmente estudiantes y obreras, sucedidas al este de la ciudad desde septiembre pasado.
Se trata de Ángel Isabel Baltazar López, de 18 años, y Abraham N, de 13, quienes fueron detenidos ayer por la Policía Municipal, y de Cristian Madrid Castro, de 18, e Ismael N, de 13, quienes fueron detenidos por la Policía Ministerial y hoy fueron presentados en las oficinas de la fiscalía en Tijuana.
Ellos comenzaron robando y después iniciaron una serie de violaciones en el área del corredor 2000, al oriente de la urbe, amenazando a sus víctimas con navajas y pistolas de juguete, dijo Josefina Valencia, directora de Averiguaciones Previas de la fiscalía.
Según el comandante de la Policía Ministerial, Adán Velázquez, los cuatro detenidos son miembros de hogares desintegrados donde los temas del alcohol y la droga han estado desde que tienen uso de razón.
Incluso el presunto líder de ese grupo, Cristian Madrid Castro, es hijo una mujer que recién fue liberada de prisión.
La Policía Municipal de Tijuana detuvo a las dos de la mañana del miércoles a Abraham N, identificado así por su condición de menor de edad, durante un recorrido de vigilancia en fraccionamiento Real de San Francisco.
Cuando lo detuvieron, dos personas se acercaron, una de ellas una mujer de 18 años, y le dijo a los oficiales que el menor la había violado el pasado 11 de febrero en una casa abandonada ubicada en la calle Cañadas del ejido Francisco Villa, informó la Secretaría de Seguridad Pública Municipal en un comunicado.
Según la policía, Abraham N aceptó su culpa y denunció primero a Baltazar López y después a los otros dos adolescentes.
La fiscalía estatal confirmó hoy que los detenidos coincidían con los perfiles de 27 denuncias por violación que tenían desde septiembre de 2010 y de las cuales ya se había realizado diversos operativos sin éxito.
La policía reveló que encontró la casa abandonada, donde cometían los ultrajes sexuales, y ahí estaban dos pistolas de juguete y tres navajas.
Las autoridades pidieron a la ciudadanía su colaboración en este caso para que en caso de reconocer a alguno de estos jóvenes acuda al Ministerio Público para que interponga una denuncia.
