Tijuana.- Los ingresos por remesas familiares enviadas a Baja California, principalmente por mexicanos que residen en Estados Unidos, incrementaron un 15.7 por ciento en el tercer trimestre de 2011, en comparación con el mismo periodo del año anterior, dijo Alejandro Díaz Bautista.
El investigador del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y catedrático en economía del Colegio de la Frontera Norte (Colef) explicó que en el periodo de julio a septiembre de este año las remesas que llegaron al estado se estimaron en 106.8 millones de dólares.
Dadas las difíciles condiciones económicas a nivel mundial y ante una moneda nacional que fluctúa uno ó dos pesos frente al dólar, según las noticias bursátiles de Europa o Estados Unidos, las remesas que envían los mexicanos a sus regiones de origen están contribuyendo a incrementar los ingresos de la economía regional.
"Es evidente que las remesas han adquirido una dimensión que les otorga un potencial de primera magnitud para generar crecimiento económico y desarrollo en las regiones que las reciben, como Baja California", dijo Díaz Bautista.
De acuerdo al especialista, estos aumentos en las divisas enviadas por connacionales al país se deben a que los mexicanos han logrado un importante ascenso social y económico en Estados Unidos; han conseguido a través de los años una mejor educación y flexibilidad laboral para trabajar en sectores o regiones no tradicionales.
Las remesas que envían los mexicanos en Estados Unidos a sus familias en México son la tercera fuente de divisas para el país después de las exportaciones petroleras y el turismo. Durante el año pasado, México recibió remesas por 21 mil 271 millones de dólares.
Eso a pesar de que el número de mexicanos que emigran a Estados Unidos anualmente se redujo en un 60 por ciento entre 2006 y 2010, pasando de más de un millón a menos de 400 mil personas, según estudios recientes del Colef.
Díaz Bautista señaló que México ha sido históricamente un país de migrantes, donde la emigración ha tenido el mayor peso. Mientras que Estados Unidos ha sido el principal destino de los mexicanos que se van al exterior.
Actualmente las personas nacidas en México que radican en los Estados Unidos representan aproximadamente el 11 por ciento del total de la población total mexicana.
Según censos oficiales de México y Estados Unidos, en 1970 había menos de un millón de mexicanos en Estados Unidos. Durante las siguientes cuatro décadas, más de diez millones de personas abandonaron México por el país vecino.
Entre 2000 y 2010, la población de origen mexicano creció en 7.2 millones de personas como resultado de nacimientos en Estados Unidos, y en 4.2 millones por las migraciones. Los estadounidenses de origen mexicano son el grupo de hispanos más grande del país, llegando a ser cerca de los 32 millones de personas.
Mientras que la comunidad hispana ha alcanzado el 16.3 por ciento de la población estadounidense y según las estimaciones del Censo, podría llegar a ser el 30 por ciento en 2050.
Díaz Bautista explicó que la diversificación geográfica regional y laboral de los mexicanos en Estados Unidos es una de las características de los flujos migratorios recientes. La región del suroeste de ese país, en los estados de California, Texas, Arizona y Nuevo México, es la que ha concentrado el mayor número de mexicanos.
Pero se tienen ya otras regiones con un gran crecimiento de la población mexicana, como en la Costa Este de los Estados Unidos, agregó, incluyendo a Carolina del Norte, Carolina del Sur, Connecticut, Delaware, Distrito de Colombia, Florida, Georgia, Maryland, Nueva Jersey, Nueva York, Pennsylvania, Rhode Island y Virginia.
"Los mexicanos en Estados Unidos no solo envían remesas a México, sino también contribuyen significativamente a la economía de Estados Unidos en la producción, consumo, pago de impuestos y en la contribución de capital humano", dijo.
El especialista agregó que su análisis económico indica que los mexicanos que trabajan en los Estados Unidos aportan cerca del cuatro por ciento del producto interno bruto (PIB) de los Estados Unidos, que equivale a cerca de la mitad del PIB total de México.
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