San Diego.- Como una manera de prevenir enfermedades y en algunos casos, la muerte, a partir del 1ro de Julio entrará en vigor la ley SB-183, una iniciativa estatal que obliga la instalación de detectores de monóxido de carbono en residencias y negocios de California.
El monóxido de carbono es un gas inodoro, incoloro y altamente tóxico, que puede causar la muerte cuando se respira en grandes cantidades.
De acuerdo a información del Departamento de Bomberos del Estado, un promedio de 480 personas mueren cada año en el país por envenenamiento de monóxido de carbono y otras 20 mil terminan en salas de emergencia.
"El monóxido de carbono es un asesino silencioso", dijo Tonya Hoover, Jefa de Bomberos en California.
Acciones que deriven en la intoxicación por este gas pueden ser tan inofensivas como dejar prendida una chimenea.
Asimismo, un estudio reciente de la organización Primera Alerta (First Alert) encontró que nueve de cada 10 casas en California no cumplen con la recomendación de colocar este tipo de dispositivos.
Los precios de estos aparatos van desde $17 dólares para el más básico hasta de $100 para lo más elaborados y pueden adquirirse en cualquier tienda de autoservicio.
"Tener uno de estos detectores es una inversión pequeña que realmente puede la vida de quién lo compra y su familia", agregó Hoover en información divulgada en un comunicado de prensa.
Autoridades recomiendan instalar estos aparatos en las habitaciones donde personas duermen, además de en cada nivel del lugar incluyendo el sótano.