SAN DIEGO.- Por casi dos años el Oficial de Aduanas y Control de la Frontera Héctor Rodríguez fue parte clave de una organización de contrabando que introdujo cientos de inmigrantes ilegales a través de las garitas de San Ysidro, de acuerdo a documentos de la corte federal.
Rodríguez, su amigo de toda la vida Gerardo Rodríguez y Vanessa Moya se presentaron por primera vez ante la corte en San Diego el lunes. Están acusados de conspiración y contrabando.
El Juez Magistrado de los Estados Unidos David Bartick ordenó que los detuvieran sin derecho a fianza hasta su audiencia el martes. El Fiscal Asistente de los EEUU, Victor White, dijo que los tres debieron ser retenidos por el riesgo de que huyeran si se les liberaba.
Héctor Rodríguez, 45, fue arrestado el viernes en el cruce de San Ysidro mientras trabajaba. Una queja detallando los cargos indicaba que desde septiembre de 2010 hasta la semana pasada, el trío facilitó al menos 37 cruces hacia Estados Unidos de vehículos repletos de inmigrantes.
Una persona que fue pasada de contrabando y luego se convirtió en un informante confidencial dijo que la tarifa por un "cruce garantizado" era de $10,000. Otro informante cruzado de manera ilegal posteriormente pagó $15,000. Ninguno fue identificado en los registros de la corte.
El Agente Especial del FBI, Terry Reed Jr. escribió en la queja que el término "cruce garantizado", al ser utilizado por organizaciones de contrabandeo, indica que un empleado federal de Aduanas y Control de la Frontera está involucrado.
El mismo término fue utilizado en la organización de contrabando que las autoridades federales suponen estaba dirigida por los hermanos ex-agentes de la Patrulla Fronteriza
Raúl y Fidel Villarreal en el 2005 y 2006.
Coincidentemente, mientras Rodríguez aparecía en corte en el primer piso del Juzgado Federal, el juicio de los hermanos Villarreal se realizaba sólo una planta arriba con el testimonio de migrantes indocumentados que pagaron $12,000 por un "cruce garantizado" hacia Estados Unidos.
En el caso de Rodríguez, las autoridades explican que le habría dicho a Gerardo Rodríguez, de 42 años, y a Moya, de 29, en qué carril se le había asignado trabajar ese día.
Luego, cuando los vehículos conducidos por el par aparecían en el carril, Héctor Rodríguez introduciría información falsa sobre los vehículos (incluyendo nombres y fechas de nacimientos falsos para el conductor) en las computadoras de la agencia.
En una ocasión, en octubre, introdujo el nombre "Barbara Walters" en la base de datos cuando Moya cruzó justo después de las 7:30pm.
Después de cruzar, Gerardo Rodríguez llevaría a los inmigrantes a un hotel, recogería el dinero y los liberaría.
El viernes, poco después de la 1:30, agentes arrestaron a Moya y a Gerardo Rodríguez junto con 14 indocumentados que habían cruzado ilegalmente en el estacionamiento de los departamentos en donde Héctor Rodríguez vivía. El fiscal acusador White comentó que Gerardo Rodríguez había pagado la renta del departamento con ganancias del contrabando.
También dijo que el oficial de la frontera había recibido regalos de Gerardo Rodríguez, incluyendo el uso de una Hummer 2008 y un Jaguar 2009. Una búsqueda en el departamento de Gerardo Rodríguez en Chula Vista produjo otros artículos de lujo como relojes Rolex, computadoras y televisiones de pantalla plana.
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Traducción: Karen.balderas@sandiegored.com
