San Diego.- Hace un año la estudiante de San Diego City College, Diana González, fue brutalmente asesinada en el baño de su escuela; el sospechoso, su esposo de quien estaba separada, aun permanece
libre.
Días después de que fue encontrado el cuerpo de la joven, Armando Gabriel Pérez recibió cargos por el asesinato.
Sin embargo, los familiares de la occisa creen que esta tragedia no hubiera ocurrido si las autoridades hubieran hecho bien su trabajo semanas antes cuando Pérez secuestró, violó e intentó estrangular a la joven de 19 años. La policía lo arrestó, pero la fiscal Bonnie Dumanis no presentó cargos contra él.
Después del asesinato de González, Dumanis dijo que el caso original carecía de pruebas, a pesar de que el reporte de la policía mostraba las lesiones que evidenciaban el estrangulamiento. Dumanis prometió que revisaría el caso, pero se negó a hacerlo público.
Dumanis se negó a comentar sobre el caso. La hermana de la víctima, Janette González dijo que la fiscalía tampoco le ha rendido cuentas a la familia.
"Si deberás no tienen nada que esconder, si creen que hicieron bien su trabajo, entonces deberían de decir algo", dijo González.
Mientras Dumanis permanece callada, los amigos y familiares de Diana planean un vigilia en City College la tarde de este martes.
La profesora Larissa Dorman comentó que esta es una oportunidad para la familia y los estudiantes de hablar sobre la violencia doméstica, según se publicó en KPBS.
Las autoridades creen que el esposo de Diana está en México y que tiene vínculos con el cartel de Sinaloa.