Atlanta, 23 ago (EFE).- Una nueva campaña busca atacar con "amor del duro" la epidemia de obesidad infantil que afecta a Georgia, el segundo estado con los mayores índices a nivel nacional.
"El propósito de esta primera fase de la campaña es crear consciencia sobre este serio problema en los padres y todos los que tienen que ver con el cuidado de los niños", dijo a Efe Carolina Cruxent, directora de mercadotecnia de programas de bienestar de Children's Healthcare Of Atlanta, el mayor proveedor de servicios de salud infantil en el estado.
La iniciativa comenzó hoy con anuncios de televisión, prensa y paneles publicitarios en las principales vías del área metropolitana de Atlanta.
De acuerdo con cifras citadas por la campaña, cerca del 40 por ciento de los niños en Georgia están con sobrepeso o son obesos, situación que según Cruxent los motivó a tomar cartas en el asunto.
"Necesitamos crear mayor consciencia sobre la crisis médica de la obesidad en los niños y las enfermedades que los niños obesos están sufriendo como la hipertensión, la diabetes tipo 2, problemas cardíacos y del hígado que antes sólo se veían en los adultos", señaló la representante.
Diversas encuestas llevadas a cabo por la organización antes del anuncio de la campaña encontraron que más de la mitad de los padres no reconocen la obesidad infantil como un problema serio.
Asimismo, al menos 75 por ciento de los padres consultados que tenían hijos obesos o con sobrepeso no consideraban a estos menores como obesos o con sobrepeso.
De acuerdo con Cruxent, la gravedad de la situación actual y el hecho de que la obesidad infantil es un problema que aumenta cada vez más en Estados Unidos fue determinante en la decisión de lanzar un mensaje "fuerte".
"La campaña ha tomado este enfoque en particular para educar, crear más consciencia y abrir un diálogo sobre la crisis. Otros esfuerzos no han funcionado y todos tenemos que abrir los ojos y luchar por la salud de los niños", dijo.
Según datos citados por Children's Healthcare Of Atlanta, actualmente los niños en Georgia podrían ser la primera generación en no vivir tanto como sus padres.
De acuerdo con cifras de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), con sede en Atlanta, la prevalencia de obesidad entre los niños de 6 y 11 años aumentó más del doble en las últimas tres décadas, incrementándose de un 6,5 por ciento en 1980 a un 17 por ciento en 2006.
La organización no está ajena a la severidad de este problema en la comunidad hispana por lo que trabajan para en un futuro incluir mensajes "relevantes" para esta minoría con respecto a las consecuencias de la obesidad infantil.
"Nosotros nos hemos dado cuenta de que los índices de obesidad entre los hispanos están muy altos y reconocemos también la importancia de la comunidad hispana en Georgia y de las necesidades especiales en cuanto al idioma", indicó.
Como parte de sus esfuerzos por crear mayor consciencia sobre el problema de obesidad en los niños, Children's Healthcare Of Atlanta creará más adelante los programas "Strong4Life" para educar a las familias sobre cómo adoptar hábitos saludables que les ayuden a mejorar el estilo de vida de los menores.
