Tucson (Arizona), 18 ago (EFE).- Las muertes y los arrestos de inmigrantes indocumentados en la frontera de Arizona han descendido un 38 y un 44 por ciento respectivamente en los diez primeros meses del presente año fiscal (octubre-julio).
Mario Escalante, vocero de la Patrulla Fronteriza sector Tucson, dijo a Efe que desde el 1 de octubre de 2010 y hasta el 31 de julio pasado se han reportado 132 decesos de inmigrantes, frente a 212 del año fiscal 2010 durante el mismo periodo.
"A pesar del descenso creemos que son muchas muertes", sostuvo el portavoz, quien también comentó que se han encontrado muchos restos cuya data ha sido difícil determinar.
Las altas temperaturas del desierto, las cuales superan fácilmente los 110 grados Fahrenheit durante el verano continúan siendo una de las principales causas de los fallecimientos.
El agente federal atribuyó la disminución en las muertes de indocumentados al descenso que también se ha registrado en los arrestos de inmigrantes clandestinos durante el presente año fiscal.
En este periodo se han registrado 109.000 detenciones de indocumentados dentro del sector Tucson de la Patrulla Fronteriza, que abarca el 90 por ciento de la frontera de Arizona con México.
El año pasado durante estas mismas fechas se habían reportado 194.000 arrestos.
Para Escalante, otro de los factores que ha contribuido en este descenso es una mayor información sobre los riesgos de cruzar el desierto de manera ilegal.
Así como también la implementación de programas que establecen penas de cárcel a indocumentados que son sorprendidos tratando de reingresar de manera ilegal a EE.UU. después de ser deportados.
Además de un programa de repatriación remota por el que indocumentados que son detenidos en la frontera de Arizona son expulsados a través de las garitas en otros estados como Nuevo México para tratar de evitar su reingreso.
"Estamos poniendo un énfasis sobre todo en aquellas personas que tienen antecedentes criminales", dijo el agente. "Creemos que todo está influyendo el flujo migratorio".
A pesar del descenso en el número de arrestos y muertes de indocumentados, el sector Tucson continúa siendo el principal corredor de tráfico humano y de drogas a lo largo de la frontera con México.
El miércoles, la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) informó del descubrimiento de un nuevo túnel cerca de la frontera de Arizona de 90 pies de largo por tres pies de ancho y tres pies de alto, que contaba con un sistema de ventilación y electricidad.
El hallazgo se hizo en la ciudad fronteriza de Nogales, después de que agentes federales observaran a un grupo de personas dentro de una camioneta que actuaban de manera sospechosa.
Las autoridades detuvieron a tres hombres y les decomisaron 2.600 libras de marihuana.
Escalante indicó que durante el presente año fiscal se ha incrementado levemente los decomisos de drogas en la frontera de Arizona.
Los agentes fronterizos han incautado hasta la fecha 876.000 libras de marihuana, frente a 866.000 del año pasado.
A pesar de los descensos en las muertes de indocumentados, organizaciones defensoras de los derechos de los inmigrantes critican fuertemente las acciones del Gobierno federal.
"No sabemos con exactitud cuánta gente fallece anualmente en el desierto de Arizona, estas cifras solamente representan el número de cuerpos o restos humanos que son encontrados", dijo a Efe Kat Rodríguez, de la Coalición de los Derechos Humanos de Arizona.
En el sector Yuma de la Patrulla Fronteriza, el cual cubre el resto del desierto de Arizona y parte de la frontera de California, ha reportado un fallecimiento durante el presente año fiscal, el primero en esta región desde 2007.